Yahoo Finanzas ¿Aprueban o suspenden los supermercados en medidas contra el coronavirus?
Los supermercados fueron uno de los primeros sectores comerciales en advertir los efectos derivados de la pandemia. Incluso antes de la declaración del estado de alarma, la histeria colectiva se tradujo en compras compulsivas, con el fenómeno de escasez de papel higiénico como denominador común. Y no solo en España, porque lo mismo sucedió antes en China e Italia, y fue posteriormente fue ocurriendo progresivamente allí donde iba llegando el virus.
Los supermercados mantuvieron sus puertas abiertas durante el confinamiento más estricto, obligándoles desde el primer minuto a un esfuerzo logístico para poner en marcha medidas de prevención. Las precauciones higiénicas se han mantenido tras levantarse el estado de alarma, y según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), se realizan con bastante éxito.
La organización de defensa de los consumidores ha visitado más de 1.000 supermercados de distintos tamaños en todas las capitales de provincia españolas y localidades de mayor tamaño y ha concluido que las medidas de prevención están extendidas en la mayor parte de los establecimientos.
La pandemia de la Covid-19 ha traído consigo la implantación de medidas higiénicas más estrictas en los supermercados: El gel desinfectante está presente en todos ellos, en muchos también abundan los guantes, y la mascarilla es obligatoria tanto para clientes como para el personal. Además, el aforo es más reducido, y es obligatorio mantener una distancia mínima de seguridad. Aunque otras no resultan tan aparentes para los clientes, como la desinfección de carros y cestas o de las superficies de venta, se realizan con la frecuenta establecida.
La entrada es el lugar más controlado y donde se encuentran todas las medidas de prevención. En algunos establecimientos, sobre todo en los más grandes, hay una persona que se asegura de que uses gel hidroalcohólico y te proporciona, además, unos guantes para realizar tu compra. La investigación asegura que en el 93% de los establecimientos visitados proporciona gel a la entrada del local y un 66% tiene guantes para uso de los clientes. No obstante, incluso cuando no están disponibles en la entrada, los guantes están disponibles en secciones específicas del supermercado, como la frutería.
Los puntos débiles de los supermercados
El principal problema es que muchos establecimientos descuidan el interior. La comprobación es menor y los productos de desinfección también escasean dentro de los establecimientos, donde solo está presente en el 24% de ellos.
El momento de pagar es el más controvertido ya que la acumulación de clientes en la cola y el contacto con el personal pueden convertir esta zona en una importante fuente de contagios. El estudio asegura que hay indicaciones para separar a los clientes que hacían cola en las caja en el 95% de los establecimientos, que el personal de caja estaba separado de los clientes por una mampara en el 94% de los casos, y en el 98% de los casos llevaban mascarilla, aunque este último dato debería haber sido un 100%, pues su uso es totalmente obligatorio.
Por cadenas, se ve que los peores datos se suelen dar en cadenas con tiendas de pequeñas dimensiones, destacando los casos de Covirán y, en menor medida, Carrefour Express y Lupa.
Los supermercados se han convertido en la representación de la modernidad. Sus productos se convirtieron en iconos del arte pop de la mano Warhol en los sesenta, como la famosa sopa de Campbell o la ‘Brillo Box’. Hoy, esta imagen de la vida cotidiana se ha visto alterada por la pandemia y las necesarias y exhaustivas medidas de prevención. La seguridad sanitaria debe estar presentes más aún los lugares que más frecuentamos, sobre todo en los supermercados dónde nos proveemos de bienes de primera necesidad.
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