En su libro, Trump describió una de sus habitaciones como "cómo habría vivido Luis XVI si hubiera tenido dinero" - Créditos: @The Wall Street Journal
NUEVA YORK.- Entrar en la casa de Ivana Trump en Manhattan, con su fachada de piedra caliza y su entrada dorada, es como retroceder en el tiempo hasta la década de 1980, cuando la difunta socialité y su exmarido, el ex presidente Donald Trump, eran la pareja de poder por excelencia. La decoración de la casa -estampado de leopardo, mármol rosa, lámparas de cristal y mucho, mucho oro- refleja la estética glamurosa y exagerada que ayudó a definir esa época y la cartera inmobiliaria de Trump.
“A mi madre le encantaba esa casa”, dijo su hijo Eric Trump, señalando que reflejaba su “estilo y elegancia”. La opulencia, dijo, “encarnaba a Ivana Trump”.
Trump y su ex esposa Ivana en 1988
Los herederos de Ivana Trump pusieron la propiedad en el mercado por 26,5 millones de dólares tras su muerte a principios de este año, dijo Eric Trump. Trump fue encontrada muerta en la casa en julio. Los ingresos de la venta se destinarán a sus tres hijos: Donald Trump Jr., Eric Trump e Ivanka Trump.
Ivana Trump compró la casa por unos 2,5 millones de dólares en 1992, el mismo año en que finalizó su divorcio de Donald Trump, según los registros. Aunque la ex modelo también tenía casas en Florida y Francia, Eric Trump dijo que la propiedad de Nueva York era especialmente importante para ella. “Ella estaba tan cómoda allí”, dijo. “Era la última posesión del mundo de la que se hubiera deshecho”.
Un martes reciente, el pequeño Yorkshire terrier de Ivana Trump, Tiger, recibió a los visitantes en la puerta de la casa adosada de aproximadamente 810 metros cuadrados, situada entre las avenidas Quinta y Madison. Desde la muerte de Trump, Tiger ha permanecido en la casa con la asistente de la mujer, a la que está unido desde hace tiempo, dijo Eric Trump.
El vestíbulo tiene alfombras de color rojo sangre, paredes de tela tapizada en rojo y dorado, láminas de mármol rosa, una araña de cristal y una estatua románica. A las plantas superiores se accede por un ascensor de jaula de pájaros a la antigua usanza y una escalera de mármol curvada con alfombra roja y un mural pintado.
La asistente de Ivana Trump sale de la residencia Trump con su perro yorkie lamado Tiger, siguiendo al ejecutivo de la organización Trump Matthew Calamari el jueves 14 de julio de 2022, en Nueva York, tras la muerte de Ivana - Créditos: @Mary Altaffer
En su libro de 2017, “Raising Trump”, Ivana Trump describió su estilo de diseño como “lujoso” y “caprichoso”. Cuando compró la casa, escribió, necesitaba un trabajo significativo. Nadie había vivido allí durante unos 12 años, y la última encarnación de la propiedad había sido como una oficina de dentista, con muchas habitaciones pequeñas.
El segundo piso tiene ahora dos áreas de entretenimiento formal. En la parte delantera hay un salón muy tapizado en tonos rojos y verdes, con un techo de tela dorada plisada y sillas de terciopelo. El espacio está decorado con figuras ornamentales y otros objetos de colección, como relojes y joyeros de plata. En su libro, Trump describió la habitación como“cómo habría vivido Luis XVI si hubiera tenido dinero”.
El comedor tiene las paredes cubiertas de tela dorada y una lámpara de araña colgando encima. Dos mesas, una redonda y otra larga y rectangular, tienen sillas de respaldo alto tapizadas en amarillo dorado. Eric Trump dijo que los muebles podrían negociarse con la venta de la propiedad, en caso de que un comprador estuviera interesado.
Entre las dos habitaciones hay un piano de cola blanco. Aunque Ivana Trump nunca tocó el piano ella misma, escribió, tenía pianistas profesionales que venían a entretener a los invitados en las fiestas. Eric Trump dijo que su hermana también tocaba el piano.
En la tercera planta hay una biblioteca decorada casi por completo con estampado de leopardo, con papel pintado y tapicería de lunares. En las paredes cuelgan un cuadro de dos leopardos jugando y una fotografía enmarcada de Ivana Trump abrazando a una joven Ivanka. Donde no hay animal print, hay oro. En el sofá descansa una muñeca inspirada en ella misma, con pelo rubio, una chaqueta plateada adornada y una estola de piel.
El dormitorio principal encarna la estética caprichosa de la celebridad. La paleta de colores es de rosas apagados, verdes y dorados. Una cama con dosel se encuentra frente a una chimenea con relieves dorados. En las paredes hay murales de estilo chino. El cuarto de baño es un estallido de rosa Pepto Bismol, desde los suelos de mármol hasta los lavamanos dobles, la bañera, los armarios y las paredes. La grifería y los herrajes tienen toques dorados. Luego está el armario. En su libro, Trump lo describe como tan grande que parece “seguir, y seguir, y seguir”.
Escalera de la casa de Ivana Trump en Nueva York - Créditos: @Ron Galella
“Lo llamo Indochine, porque cuando llegas al final, podrías estar en otro continente”, escribió.
En la parte trasera de la casa hay un jardín orientado al sur y una terraza junto al dormitorio principal, que recibe mucha luz a media mañana y a primera hora de la tarde.
“Solía salir al balcón privado cada mañana con un café y leía el diario”, dijo Eric Trump.
Eric Trump dijo que él y sus hermanos vivieron en la casa durante su adolescencia. Tiene recuerdos felices de la familia charlando alrededor de la mesa del comedor y de las fiestas de su madre, que a veces incluían a actores famosos e incluso a la realeza, dijo.
En un momento dado, Trump convirtió el antiguo dormitorio de Donald Trump Jr. en un gimnasio. Desde allí, podía ver la casa de enfrente, donde vivía la diseñadora de moda Donatella Versace, dijo Eric Trump. Ella saludaba a la diseñadora desde la cinta de correr. “Se querían”, dijo.
Una de las salas de la casa de la ex pareja de Donald Trump en Nueva York - Créditos: @The Wall Street Journal
La casa de cinco pisos y seis metros de ancho está configurado actualmente con cinco dormitorios, pero podría ser rediseñado para dar cabida a más, de acuerdo con los agentes del listado, Adam Modlin de Modlin Grupo y Roger Erickson de Douglas Elliman. Dos de los pisos están actualmente divididos en varias habitaciones, pero esos espacios podrían combinarse para aprovechar toda la anchura de la casa adosada, dijeron los agentes.
La única amenidad que brilla por su ausencia: una cocina de tamaño completo. Hay dos pequeñas cocinas tipo galera, una junto al comedor en el segundo piso y otra junto a un estudio en el nivel del jardín. Ivana Trump, según ha admitido, no cocinaba mucho en sus últimos años. Los agentes dijeron que un comprador podría construir una cocina más grande en el nivel del jardín.
Los agentes dijeron que la mayoría de los posibles compradores querrán hacer una renovación significativa. Eric Trump dijo que su madre una vez tuvo planes para construir una pileta en el sótano, que ya incluye una sauna, pero cambió de opinión.
Una de las habitaciones de la residencia de la difunta Ivana Trump - Créditos: @The Wall Street Journal
El bloque es uno de los más ilustres de la ciudad, según los agentes del listado. Además de la mansión de Versace, que ahora es propiedad del inversor Thomas Sandell y su esposa Ximena Sandell, la calle ha atraído a grandes nombres como el multimillonario Len Blavatnik y el magnate discográfico Tommy Mottola, según los registros públicos y personas familiarizadas con las propiedades.
“Es como estar entre Boardwalk y Park Place en un tablero de Monopoly”, dijo Modlin.
La propiedad de Trump sale al mercado cuando el mercado de casas adosadas de Nueva York se reactiva. En los últimos meses, una serie de importantes ofertas de casas adosadas en el Upper East Side se han cerrado, a pesar de lo que los agentes dicen es un mercado de enfriamiento para las casas de lujo en todo el país. Entre ellas, la venta de una mansión de estilo Beaux-Arts, propiedad de la Misión Permanente de Serbia ante las Naciones Unidas, por 50 millones de dólares, y la venta de la casa del inversor inmobiliario Keith Rubenstein, por 48 millones de dólares.
El baño de la casa de Ivana Trump - Créditos: @The Wall Street
Trump, que fue modelo, procede de la antigua Checoslovaquia. Mientras estaba casada con Donald Trump, asumió varias funciones en la Organización Trump, incluida la de vicepresidenta de diseño de interiores. También supervisó la construcción y el diseño de la Torre Trump y el Hotel Trump Plaza. Más tarde, tuvo su propia línea de moda.
“No era una persona del tipo ‘vamos a ponernos un pantalón de chándal’”, dijo Eric Trump. “Ella creía en el buen aspecto”.
Por Katherine Clarke
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