El anuncio más explosivo de Paris Hilton ya tiene secuela 9 años después

Ocurrió allá por 2005 y todavía sigue dando que hablar. Paris Hilton, que por entonces estaba más en la cresta de la ola que nunca, sorprendió al mundo entero con un polémico anuncio en el que aparecía lavando un coche en bikini mientras se comía una hamburguesa de la marca Carl’s Jr.

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Casi una década después, la misma compañía quiere repetir el éxito que supuso esa campaña a nivel de notoriedad y ventas, para lo cual han lanzado una secuela. Aunque han tenido mucho tiempo para pensar una idea creativa que sorprenda al espectador, la realidad es que finalmente han optado por hacer más de lo mismo y confiar en que sea suficiente para que el spot sea viral.

La protagonista principal de la pieza es la modelo de Sports Illustrated Hannah Ferguson, que luce palmito mientras limpia con poca ropa un todoterreno completamente embarrado. Tras dejarlo como los chorros del oro se come una hamburguesa de gran tamaño y discutible aspecto, dejando caer un jalapeño sobre el vehículo. En ese momento hace acto de presencia el principal gancho de la campaña.

Con el mismo modelo que en el mítico anuncio, Paris Hilton aparece en el lugar diciéndole a su compañera de reparto que se ha dejado una mancha. Pero en esta ocasión no se dedica a la limpieza, sino que comparte con ella la gigantesca Texas BBQ Thickburger. Es decir, que puede decirse que su aparición es un simple cameo con mucho menos tirón para sus seguidores que en el spot de 2005.

De momento la campaña está a años luz de lograr la misma repercusión que su predecesora, aunque ya se ha visto envuelta en la predecible polémica de ser acusada de sexista y degradante para la mujer. Lo que es seguro es que este anuncio si consigue pasar a la historia no va a ser por su ingenioso guión, por la sublime interpretación de sus protagonistas o por un inesperado giro final que sorprende al espectador. La pregunta es, ¿al público al que va dirigido realmente le importa?

Un lavado de coche difícil de olvidar
El vídeo de Paris Hilton fue sin duda uno de los temas más comentados en 2005, ya que en esa época gozaba de sus mayores índices de popularidad a raíz de sus constantes escándalos. La página web de la cadena de comida rápida se colapsó poco después del lanzamiento ante la avalancha de usuarios que deseaban ver el vídeo, y el Consejo de Padres y Televisión de Los Ángeles hizo todo lo posible para intentar que fuera retirado de la pantalla al considerarlo "pornográfico". Entre todos consiguieron que este spot entrara a formar parte de la historia del mundo de la publicidad.