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¿Cuándo merece la pena tener hipoteca de tipo fijo o variable?

Jaime Quirós – El mercado de la vivienda se está moviendo mucho. Ya no solo los alquileres, sino también en compras. Los bancos empiezan a notar el flujo del crédito y la recuperación, aunque los filtros sean más exigentes que los establecidos antes del estallido de la crisis. La firma de hipotecas aumentó un 9,2% con respecto a hace un año, según los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística. Un porcentaje que evidencia la tendencia alcista.

Con la nueva reforma de la ley hipotecaria muy cerca de entrar en debate, todo apunta a que los clientes podrán cambiarse de su hipoteca de tipo variable a fijo prácticamente de manera gratuita. Algo que abriría la posibilidad para todo el mundo de jugar con la evolución de los tipos de interés para ahorrarse costos. Pero la duda es: ¿en qué momento sería mejor hacer ese tipo de cambio?

De forma previa a realizar el cambio impulsivamente, lo primero de todo es dibujar un esquema para saber en el tablero en el que se está jugando en la actualidad. Es decir, qué supone para los consumidores el hecho de optar por una opción u otra, o si es momento de apostar por el tipo fijo ahora o dejar correr el tiempo para luego hacer el cambio.

Lo cierto es que a día de hoy se ha vivido una auténtica revolución en las hipotecas de interés fijo. De hecho, tal y como se observa a través de los datos del INE, de los nuevos contratos, el 38,7% se constituyeron a un interés fijo. La dinámica ha derivado del Euribor en mínimos históricos (hasta en negativo) y el miedo a un aumento a futuro de los tipos de interés, que ahora mismo el BCE tiene fijados en cero.

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[También de interés: La guerra de Bruselas contra España por las hipotecas]

Elegir entre una hipoteca de tipo fijo o variable dependerá de la situación en la que se encuentren los tipos de interés y la incertidumbre económica. Foto de Getty Images.
Elegir entre una hipoteca de tipo fijo o variable dependerá de la situación en la que se encuentren los tipos de interés y la incertidumbre económica. Foto de Getty Images.

¿Pero es acertada esta apuesta? ¿El escenario se puede prolongar mucho? La respuesta no es sencilla. Las estimaciones que maneja la media de los analistas es que los tipos podrían entrar en terreno positivo en 2019 o, incluso, en 2020. Esto daría margen a aquellos que estén gozando de hipotecas a tipo variable a día de hoy. Pero el panorama hipotecario está en vías de cambio.

Según apunta Santos González, presidente de la Asociación Hipotecaria Española, en palabras que recoge el diario El Mundo, “inevitablemente las hipotecas serán más caras… En general la incertidumbre nunca fue buena para el riesgo, y esto se trasladará a la oferta, y no es bueno porque la vivienda es algo muy importante, por lo que hay que relajar un poco la situación”.

Una de las premisas en el mercado de las hipotecas es que siempre a mayor nivel de riesgo se produce un mayor interés. Un riesgo que, en este caso, corre a cargo del propio cliente: cuantas más garantías de pagar a la entidad bancaria, mejores condiciones tendrán para el crédito solicitado.

Así pues, sabiendo que hemos atravesado una guerra de precios, no es paradójico afirmar que los precios de las hipotecas gozan de más probabilidades de aumentar que de proseguir una tendencia a la baja.

Más aún cuando los bancos cada vez utilizan más mecanismos para seducir con el tipo fijo, lo cual pone de manifiesto que el entorno es muy incierto y que quizá el tipo variable aún pueda ser más conveniente unos años más para los bolsillos de los españoles. Al menos hasta que la institución monetaria europea comience a cambiar su rumbo con contundencia.

IDNet Noticias