Yahoo Finanzas El Gobierno reduce el IVA del pan sin gluten para celíacos hasta el 4%
Los celíacos pueden estar contentos. A partir de ahora, el pan sin gluten debería de ser bastante más barato. El Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, a través de la Dirección General de Tributos, aprobó hace unos días la rebaja en el IVA de este producto. Desde septiembre de 2012 tributaba a un IVA del 10%; a partir de ahora, pasará a formar parte del grupo de bienes con IVA superreducido, por el que solo se aplica el 4%.
En un comunicado, la institución detalla esta novedad: "Tributarán al tipo del 4%, el pan común (incluido el pan bregado, de miga dura y el pan de flama o miga blanda), la masa de pan común congelada y el pan común congelado, cuando dichos productos hayan sido objeto de un tratamiento especial para reducir el contenido de gluten o cuyos ingredientes con gluten hayan sido sustituidos por otros, siempre y cuando se comercialicen con la indicación de "contenido muy reducido de gluten" o "exentos de gluten" en los términos a que se refiere el Reglamento (CE) Nº 41/2009.
Se quedan fuera, eso sí, los panes especiales como los biscotes, los colines, el pan de molde o el pan rallado, aunque se traten para reducir el gluten. Estos productos seguirán, por tanto, tributando a un 10%.
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La Federación de Asociaciones de Celíacos de España (uno de cada cien lo es en España) ya se quejó en su momento de esta discriminación, que suponía encarecer más aún un producto de por sí con un precio más elevado que el pan normal, debido a la producción más limitada y al tratamiento que requiere. En este sentido, la ministra de Sanidad, Ana Mato, ya se comprometió en el Congreso de los Diputados a finales de septiembre a bajar el tipo impositivo por considerar que se trata de un bien de primera necesidad, pero la rúbrica no ha llegado hasta ahora. La propia Federación había asegurado en una nota de prensa que este IVA más alto le suponía a cada celíaco un desembolso extra de hasta 1.500 euros anuales de media. Ahora habrá que comprobar que, finalmente, sí se hace notar en el precio final.
