La manera más sorprendente de concienciar sobre el abuso del alcohol

Las campañas de consumo responsable de alcohol suelen alertar de manera cruda sobre las consecuencias negativas que puede tener para nuestra salud beber en exceso. Es una fórmula mil veces repetida, pero sigue siendo efectiva a la hora de conseguir que las personas reflexionen sobre el problema.

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Precisamente por ello sorprende la decisión tomada por Diageo, que ha apostado en su nueva campaña por un recurso bien diferente como es el humor. El líder mundial de bebidas espirituosas Premium ha apelado a un motivo insólito para que la gente se lo piense dos veces antes de tomar unas copas de más: piensa en tus amigos y no les avergüences.

Para transmitir este innovador mensaje han lanzado un vídeo en el que aparecen varias personas que claramente han bebido en exceso. Con un toque cómico, los protagonistas de la pieza van siendo catalogados con un nombre según lo vergonzoso de su comportamiento debido a su lamentable estado.

Poco a poco van apareciendo “el submarinista”, “el rotonda”, “la equilibrista” o “piernas de gelatina”, presentados por una voz en off como si se trata de un concurso para elegir la actuación más vergonzosa. En todos los casos aparece el nombre de la persona y su profesión, para hacer ver que cualquier persona que no beba con moderación puede acabar inmerso en una situación así.

"Estamos usando el humor de manera deliberada para captar la atención de la gente. Las campañas de consumo responsable han tendido en el pasado a sermonear o asustar. Sabemos que el consumo excesivo de alcohol es un asunto serio, pero nuestra principal preocupación es ser efectivos", ha afirmado Malcom D'Sa, director de Marketing de Diageo Western Europe.

La campaña se completa con una web en la que puedes saber el tiempo que tarda en desaparecer de tu organismo el alcohol consumido. Pero para ser originales, la medida que emplean no son horas y minutos, sino las veces que tendrías que ver la película 'Titanic'. Por ejemplo, una persona que se tome cuatro copas tendría que ‘tragarse’ dos veces seguidas la cinta de James Cameron hasta que su organismo quedara limpio. ¿Merece la pena?