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Los dirigentes europeos buscan formas de recortar la dependencia del gas ruso

BRUSELAS (Reuters) - Los dirigentes europeos buscarán formas de reducir su multimillonaria dependencia del gas ruso en las conversaciones que se darán en Bruselas el jueves y el viernes, pero no llegarán a cortar los lazos energéticos con Moscú por ahora.

La toma de la región ucraniana de Crimea por parte de Rusia ha reavivado las dudas sobre si la Unión Europea debería continuar dependiendo de Rusia para casi un tercio de su gas, proporcionando a Gazprom una media de 5.000 millones de dólares (unos 3.590 millones de euros) al mes en ingresos. Aproximadamente el 40 por ciento del gas se envía a través de Ucrania.

Alemania, peso pesado en la UE, está entre quienes tienen vínculos particularmente estrechos con Rusia y se ha hecho eco de los comentarios de Gazprom, el mayor productor ruso de gas natural, de que Rusia ha sido un proveedor fiable durante décadas.

Los suministros rusos de gas a la Unión Europea se vieron interrumpidos en 2006 y 2009, pero sólo por los efectos colaterales de la ruptura de Moscú con Ucrania por no pagar sus facturas. Aunque estos incidentes resultaron en intentos de la UE de diversificar sus fuentes de energía, los contratos con el bloque siempre se han respetado.

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Responsables oficiales de la UE dijeron que la actual crisis en Ucrania, sin embargo, había convencido a muchos en Europa de que Rusia ya no era fiable y la voluntad política para terminar con su dominio del suministro nunca ha sido mayor.

"Todo el mundo reconoce que es necesario un importante cambio de rumbo por parte de la Unión Europea", dijo un portavoz de la UE bajo condición de anonimato.

"En el fondo, habrá siempre la duda de que, si la relación se agria, Rusia tiene el arma y no debería ser así", dijo otro cargo, en referencia a la opción de Rusia de recortar suministro.

Como alternativas al gas importado, las conversaciones de Bruselas debatirán los "suministros naturales", que incluyen la energía renovable y el gas de esquisto.

También subrayará la necesidad de eficiencia energética y de construir mejores vínculos transfronterizos para compartir recursos, controlar costes y desarrollar la capacidad de la UE para bombear gas a Ucrania.

El debate también se centrará en cuánto gas estadounidense puede enviarse a Europa, poco antes de la visita del presidente estadounidense, Barack Obama, a Bruselas la semana próxima. A corto plazo, responsables oficiales dijeron que Catar podría incrementar sus suministros.

También se espera que los miembros de la UE prometan proporcionar a Ucrania gas si es necesario, pero probablemente no den detalles sobre cuánto podría ser, según diplomáticos de la UE.

También dijeron que Dinamarca había propuesto que la Comisión Europea informe antes de junio sobre qué puede hacerse para incrementar la seguridad energética de la UE y que la idea tiene amplio apoyo.

UN BONO A CUARENTA AÑOS

Deseoso de subrayar su relevancia, Gazprom emitió la semana pasada un comunicado para celebrar el 40 aniversario del suministro de gas ruso a Alemania en virtud de contratos de largo plazo con E.ON. El gas ruso se envía directamente a Alemania a través del gasoducto Caudal del Norte, específicamente construido para evitar Ucrania.

E.ON es una de las empresas cuyo modelo de negocio se ha visto afectado por un cambio de la UE hacia la energía verde. La compañía dice que la red necesita la generación gasística para equilibrar la energía intermitente del sol y el viento.

Una de las muchas cuestiones es la extensión a la que el gas de esquisto puede sustituir las importaciones.

Hasta ahora, la oposición de la opinión pública y la diferente geología de Europa supone que no puede alcanzar la revolución del "fracking" en Estados Unidos, que ha reducido los costes energéticos en ese país. Incluso en la industria del petróleo y el gas, muchos son cautos sobre las perspectivas para el gas de esquisto de la UE.

Eso deja a la industria de la UE irritada por lo que ve como una desventaja competitiva, cuando la crisis de Ucrania probablemente ayude a inflar aún más los precios de la energía. Está buscando ayuda para que la industria intensiva gestione los costes, que dice que se han visto elevados por las ayudas para aumentar la proporción de energía verde.

El lobby de las renovables dice que el auténtico motor de los costes energéticos son los combustibles fósiles importados, de los cuales Europa gasta más de 400.000 millones de euros al año.

"La UE está criticando la invasión rusa de Crimea al tiempo que echa dinero a las arcas rusas por las importaciones de gas", dijo Thomas Becker, consejero delegado de la Asociación Europea de Energía Eólica, que está pidiendo un objetivo más estricto sobre el uso de energías renovables.

La comisaria europea del Clima, Connie Hedegaard, dijo que sólo las conversaciones deberían enviar una "señal fuerte". Un borrador de la cumbre dice que el bloque tiene que remitir su contribución a las Naciones Unidas sobre el cambio climático para el primer trimestre de 2015.

Esa idea decepcionará a quienes dicen que el marco es urgente para alentar la inversión en la energía de bajas emisiones y para reducir las importaciones de combustibles fósiles, además de para forjar la posición negociadora de la UE antes del acuerdo sobre el clima de la ONU que se espera firmar a finales del próximo año.

/Por Barbara Lewis