Llega al supermercado la ‘guerra’ de los productos frescos
El consumo ha mejorado tímidamente a finales del año pasado pero en el conjunto de 2013 las ventas del comercio minorista cayeron un 3,9%, con lo que el sector ya acumula seis años consecutivos de retrocesos en su facturación. Se moderó en todo caso y según constata el Banco de España, la sangría de ventas respecto a 2012, año en el que la facturación del sector disminuyó un 7%. De hecho, en 2013 se registra el menor retroceso de las ventas del comercio minorista desde 2010 (-1,8%). Las ventas de alimentos siguieron la misma senda aunque los supermercados lograron cerrar el año sin descenso de ventas, con un nivel similar al del ejercicio anterior.
Este estancamiento ha provocado que las insaciables cadenas de supermercados inicien la batalla por conseguir llevarse el mayor mercado posible de producto fresco, una de las pocas actividades que tienen potencial de crecimiento en este sector a juicio de los expertos. La pugna por este tipo de cliente puede ser especialmente dañina para los mercados tradicionales y las pequeñas tiendas.
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La consultora Kantar Worldpanel considera que el crecimiento potencial de la distribución está en ese segmento. Según datos de esta firma citados por ABC en 2013 la cadena de supermercados mejor posicionada en el área de productos frescos fue Mercadona, con un 17,25% de cuota de mercado en valor y un aumento de casi un 1% en relación al ejercicio anterior. Carrefour logró una cuota en del 4,58%, seguido de Dia, con un 4,22% del mercado de los frescos de la distribución.
Y de hecho, el motor de esta guerra ha sido, cómo no, la firma de Juan Roig, que el año pasado decidió cambiar su filosofía en la venta de frescos tras reconocer que no funcionaba el modelo existente. En 2014 esta cadena prevé tener todas las tiendas operando bajo el nuevo sistema de venta de frescos con una nueva forma de comercializarlos. "Si quieres vender los productos al día tienes que liquidar" y rebajar los precios a última hora del día si no los has vendido, dice la empresa.
El cambio en la venta de frescos les ha supuesto pasar de los productos envasados en pescado, carnes, frutas y hortalizas hacia el sistema tradicional de venta al corte por peso y unidades, lo que les ha acarreado transformaciones internas y externas. Mientras que antes realizaban los pedidos de productos frescos cada 3 o seis días, ahora se hacen al día. Pero es lo que busca el cliente y que antes solo encontraba en algunos súper, en los mercados tradicionales o en los hipermercados.
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Según otra de las consultoras especializadas en gran consumo, Nielsen, las distribuidores y marcas están poniendo el foco en estos productos ya que son los grandes generadores de tráfico en las tiendas y representan un tercio de lo que gastamos los consumidores. Los españoles compramos pan, frutas o carne un mínimo de 2 ó 3 veces a la semana, muy por encima de nuestros vecinos europeos.
Y otro de los puntos importantes de los productos frescos, según Nielsen, es que esta actividad permite diferenciarse no solo a través del producto en sí, sino también mediante el servicio y la calidad, uno de los grandes retos del sector.
En la actualidad el 26% de los españoles asegura comprar la carne, el pescado, la fruta y la verdura en tiendas tradicionales, 8 puntos porcentuales más que la media europea, mientras que una mayoría elige el supermercado y después el hipermercado. Con estos datos en la mano, podemos aventurar que la fisonomía comercial de nuestros barrios todavía va a cambiar mucho en los próximos años.
IDNet Noticias
@Jorcha