Terrazas asfixiadas por el calor y las pérdidas
Tapas de calor, raciones de sofoco o comidas a 40 grados dejan las terrazas vacías. Lo comprobamos en la Plaza del Pilar de Zaragoza. La Plaza Mayor de Ciudad Real también sobrevive sin clientes y con muchas pérdidas, de hasta el 40% comparado con el año anterior. En Sevilla, ni las sombrillas ni los chorritos invitan a tomar algo. En Valencia sufren una clientela demasiado asfixiada. Pero en Madrid encontramos a una valiente, aunque las mesas y sillas se quedarán solitas hasta por la tarde, cuando las terrazas recobren su refrescante vida.