Prisión para el dueño de un bar por causar demasiado ruido
La vida de José Antonio Ruiz se vio alterada a principios de 2010 cuando una familia, que vivía encima de su bar, le denunció por exceso de ruidos. En ese momento comenzó su pesadilla, la cual ha finalizado con una sentencia que le obliga a ir a prisión. La Audiencia Provincial de Granada le condenó el pasado junio a dos años y tres meses de cárcel por un delito contra el medio ambiente y otros dos por lesiones. Tras varios intentos por derogar dicha resolución, como la recogida de firmas o el interponer un recurso de casación, tendrá que ingresar en las próximas horas en prisión. Mientras, sus vecinos le apoyan porque consideran la condena una injusticia. -Redacción-