Nuevo atentado en Irak deja 35 muertos

Mira, paralizado, los escombros porque podría haber sido uno de los 35 muertos, o de los más de 60 heridos del último ataque de Estado Islámico en Irak. Eran terroristas suicidas. Su objetivo, la gente que entraba en este templo chií. Los supervivientes besan las puertas del lugar sagrado. Y el responsable del templo dice que agradecen a Dios que los terroristas no puedieran acceder al interior. Explica que uno de los atacantes se hizo estallar fuera y comenzó un tiroteo. El segundo atacante fue abatido. Pero el tercero parece que hizo detonar su cinturón explosivo en este mercado, donde recogen los restos de la tragedia. Sucede solo cinco días después de la masacre de esta zona comercial de Bagdad, que dejó casi 300 muertos. Edificio que ahora se convierte en un símbolo donde rezar por las víctimas del yihadismo en Irak.