Más de 25.000 extranjeros han dejado sus países para hacer la yihad con Estado Islámico, según la ONU

Franceses, finlandeses, rusos... También españoles. Pero sobre todo, tunecinos y marroquíes. Más de 100 nacionalidades se unen a la yihad. La cifra, según la ONU, ha aumentado un 71% en apenas 10 meses. Traducido en números: más de 25.000 extranjeros han dejado sus países para hacer la 'guerra santa'. Su destino, los campos de entrenamiento del autodenominado Estado Islámico. Esta organización terrorista planta cara a Al Qaeda desde que su líder Abu Bakar Al Bagdadi ofreciera a quienes quieren empuñar un arma en su nombre la promesa de un califato que se extiende entre Siria e Iraq. Un incremento alarmante en las filas de Estado Islámico que, según la ONU, plantea un problema de seguridad global urgente. Problema al que hay que hacer frente porque las Naciones Unidas alertan de que el mayor peligro está en que los combatientes extranjeros exporten la yihad a sus países de origen. Lo hemos visto en Francia con el ataque a Charlie Hebdo, en Dinamarca, Bélgica o más recientemente, en Túnez. -Redacción-