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Bautizan en Mónaco a los dos hijos gemelos del Príncipe Alberto

Entre los 700 invitados que han ido llegando a la catedral de San Nicolás hemos visto a los miembros de la familia real monegasca. Carolina y sus hijos, Estefanía y los suyos, con algunas notables ausencias como la de Carlota Casiraghi de viaje en Asia. Los protagonistas los dos mellizos vestidos de Baby Dior llegaban en brazos de sus niñeras. En la puerta del templo sus felices papas Alberto de Mónaco y Charlene les tomaban el relevo para entrar con sus pequeños en brazos. Jacques y Gabrielle recibían las aguas bautismales con los ojos bien abiertos y sin derramar una lágrima. Así han estado prácticamente toda la ceremonia hasta cuando han salido a hacerse la foto de familia con sus padres y padrinos, todos famliares de las distintas ramas. Parecían estar encantados de ser el centro de todas las miradas. Después del bautizo, el Príncipe heredero y la princesa Gabriella han recibido sus primeras condecoraciones oficiales de la orden de Grimaldi. El principado se ha vestido de gala para el bautizo real. Miles de monagescos han seguido la ceremonia desde una pantalla gigante instalada en la plaza del Palacio. Muchos han sido los que no han querido perderse el gran día. Es tradición que los principes inviten a los habitantes de Mónaco a los acontecimientos más importantes de sus vidas. -Redacción-