Así se fugó "El Chapo" Guzmán

El gobierno mexicano ha difundido una cinta en la que se recoge el momento en el que el jefe del cártel de Sinaloa desaparece por el suelo de la ducha. Son las 20h52 del sábado 11 de julio. Guzman parece nervioso, pero nada hace pensar que esté a punto de evadirse. Se cambia de calzado, se dirige hacia el único ángulo muerto que hay en la celda y se agacha. Minutos más tarde, los guardianes se inquietan al no verle salir de allí. El resto ya lo conocen. Bajo la ducha, sus compinches habían cavado un túnel de kilómetro y medio, setenta centímetros de ancho y más de un metro de alto, con luz, ventilación y una motocicleta sobre raíles que les permitió sacar los escombros hasta una casa cercana a la penitenciaría de Altiplano. La pregunta que todo el mundo se hace es ¿cómo una obra de tal magnitud pudo pasar desapercibida en una prisión de alta seguridad? Las autoridades mexicanas están interrogando a 22 trabajadores del penal que podrían haberle ayudado a escapar. El gobierno mexicano ha ofrecido una recompensa de tres millones y medio de euros a quien pueda dar alguna información sobre su paradero. Y está colaborando con Estados Unidos para localizarle, aunque no será fácil. Según la prensa mexicana, la DEA habría advertido hace más de un año al ejecutivo de Peña Nieto de los planes del cártel de Sinaloa para sacar al capo de prisión. Esta es la segunda vez que Guzmán consigue evadirse de la cárcel. La otra vez pasó trece años en la clandestinidad y fue capturado porque cometió un error de principiante al ir a visitar a su mujer y a sus dos hijas.