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'Top Gun: Maverick' trae de vuelta a Val Kilmer con el homenaje más precioso posible

ATENCIÓN: Este artículo contiene detalles de la trama de Top Gun: Maverick.

Tom Cruise nos trae de vuelta uno de sus grandes clásicos de los 80. A 36 años del estreno de la película original, Top Gun regresa a nuestra pantallas con una secuela de tono nostálgico que trae a nuestros días todo aquello que tan bien funcionó en 1986, lo que también incluye la vuelta de importantes miembros de su reparto original. Aunque la ausencia de personajes como el de Kelly McGillis es notoria, es muy emocionante volver a ver a Cruise surcar los cielos y aventurarse con combates y acrobacias de infarto como si el tiempo no hubiera pasado, aunque más emoción produce ver a un regreso tan poco probable como el de Val Kilmer, quien protagoniza la que posiblemente sea la secuencia más emotiva y preciosa de todo Top: Gun Maverick.

Tom Cruise como el Capt. Pete
Tom Cruise como el Capt. Pete "Maverick" Mitchell en 'Top Gun: Maverick' de Paramount Pictures, Skydance y Jerry Bruckheimer Films. (© 2022 Paramount Pictures. All Rights Reserved.) (Paramount Pictures)

Kilmer, que alcanzó su esplendor como actor en los 80, dio vida a Tom Kazansky, el personaje también conocido como Iceman que se erigió como el principal antagonista de Maverick, el rol de Cruise. Fue sin duda uno de los papeles más recordados de Kilmer de aquellos años, tanto por el carisma y carácter arrollador del actor como por la extrema masculinidad y arrogancia del personaje, que lo consolidaba como el contrapunto perfecto al protagonista de la historia. Pero por mucho importancia que tuviera en Top Gun su regreso a la secuela bajo el mismo enfoque que antaño era totalmente improbable.

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Primero, porque, al contrario que Tom Cruise, el actor hace tiempo que dejó atrás su imagen de guaperas carismático de Hollywood. Desde hace más de una década ha estado inmerso en muchas producciones de baja estima que nada tienen que ver con aquellos años donde protagonizó cintas de la talla de Willow, La muerte golpea dos veces, The Doors, Tombstone o Batman Forever. Pero, más allá de que en los últimos años incluso le hayamos visto rozar la serie B, Kilmer atraviesa uno de los momentos más difíciles de su vida por problemas de salud.

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En 2015, cuando se encontraba en medio de una gira por Estados Unidos con su espectáculo de monólogos Citizen Twain, fue diagnosticado de cáncer de laringe. En un inicio negó la enfermedad, aunque dos años después salió a confirmar la información y medios como The Hollywood Reporter se hicieron eco de que, en el proceso de curación donde se enfrentó a varias sesiones de quimioterapia y a dos traqueotomías, perdió la voz y tuvo que empezar a comunicarse con una laringe eléctrica instalada en su tráquea.

Sin duda, esto fue un varapalo para Kilmer y le cerró casi por completo las puertas a seguir actuando. Y digo casi porque, aunque hubiera muchas dudas al respecto y ni siquiera se llegara a mostrar a su personaje en los tráilers, en Top Gun: Maverick se le ha brindado la oportunidad de regresar por la puerta grande. Era imposible volver a ver a Iceman desempeñando la función que tuvo en la película de 1986, pero el equipo de la secuela de Top Gun se las ha ingeniado para honrar el legado del personaje, admirar la figura de Val Kilmer y darle una oportunidad preciosa de lucirse en pantalla con un homenaje que es puro cariño y emoción.

LOS ANGELES, CALIFORNIA - NOVIEMBRE 18: Actor Val Kilmer asiste al 2019 annual Thespians Go Hollywood Gala en Avalon Hollywood el 18 de noviembre de 2019 en Los Angeles, California. (Photo by Michael Tullberg/Getty Images)
LOS ANGELES, CALIFORNIA - NOVIEMBRE 18: Actor Val Kilmer asiste al 2019 annual Thespians Go Hollywood Gala en Avalon Hollywood el 18 de noviembre de 2019 en Los Angeles, California. (Photo by Michael Tullberg/Getty Images)

Aunque el personaje juega un papel importante en la trama mediante varios mensajes de texto que envía a Maverick, la presencia en pantalla de Kilmer se limita a una única escena. Sin embargo, todo lo que hay en ella es suficiente para dar al actor el respeto y admiración que merece. Habría que empezar mencionando el camino que se recorre para llegar a dicho momento, un hilo argumental que tira por la borda las rivalidades del pasado entre Iceman y el personaje de Tom Cruise, resalta la buena amistad y compañerismo que guardan en la actualidad y que avanza el buen destino del rol de Kilmer como Almirante.

Esta emoción previa, que retoma y da un final aún más feliz a una de las tramas del pasado, juega un papel importante para que lleguemos con los sentimientos a flor de piel al reencuentro entre Tom Cruise y Val Kilmer. Es entonces cuando nos cuentan que Iceman, al igual que Kilmer en la vida real, padece un cáncer de garganta y no puede hablar, asistiendo a una escena donde debe comunicarse con Maverick mediante el uso de un ordenador. Iceman, consciente de que su tiempo se acaba, trata de rememorar sus batallas del pasado y aconsejar al personaje de Cruise sobre la difícil misión a la que debe enfrentarse. Y no hace falta ser muy perspicaz para darse cuenta de todas las implicaciones que se han tratado de plasmar en este momento.

Al igual que el tiempo de Iceman es limitado como consecuencia de su cáncer, el equipo de Top Gun: Maverick, conscientes de que el tiempo de Val Kilmer como estrella de grandes producciones de Hollywood ha llegado a su fin a consecuencia de su pérdida de voz, le han dado esta oportunidad de lucirse en pantalla en un gran blocksbuster, recordarnos su legado recuperando a uno de sus personajes más míticos y traernos a la mente que, aunque la vida no se haya portado bien con él en los últimos años, fue una de las grandes figuras del cine de los 80 y 90. Y con el carácter de homenaje implícito en la escena, con la emoción que se percibe en las miradas de Kilmer a cámara y el cierre definitivo a su historia que se da justo a continuación, es imposible no acabar soltando al menos alguna lágrima.

Valorando la situación de Kilmer podrían haber obviado completamente al personaje, como bien han hecho con Kelly McGillis. Pero no ha sido el caso. En su lugar nos han brindado este homenaje que se podría catalogar como la despedida más preciosa, emotiva y afectuosa que se podría tener hacia una de las grandes figuras de Hollywood. No sabemos si en algún momento se verá capacitado a volver a actuar enfrentándose a las limitaciones que le ha impuesto el cáncer, pero de lo que no queda duda es que se sentirá eternamente agradecido por haber tenido esta oportunidad de volver a lucirse por todo lo alto en la gran pantalla.

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