Yahoo Finanzas Viajar sin salir de casa: cómo disfrutar de la realidad virtual en plena cuarentena
Ha llovido mucho desde que los visores de realidad virtual era auténticos cascos de gran tamaño y se limitaban a mostrar horribles imágenes poligonales con dudosa profundidad. Ahora la realidad virtual va mucho más allá ver imágenes en tres dimensiones, y es que son capaces de hacerte disfrutar auténticas experiencias.
Gracias a la tecnología que ofrecen, ahora somos capaces de disfrutar de actividades sin salir de casa, algo completamente de ciencia ficción que cobra todo el sentido del mundo en cuanto lo pruebas. Pero, ¿cómo?
Los visores de realidad virtual
Lo primero que tenemos que conocer son los visores de realidad virtual. Existen varios modelos en el mercado, encontrando versiones fabricadas por Valve u otros por Oculus, una compañía que pertenece a Facebook. Esto último fueron los que trajeron de vuelta la realidad virtual con la intención de quedarse, ya que con un modelo llamado Oculus Rift, permitió por primera ver introducir la realidad virtual en los hogares.
El problema de este modelo, y que muchos siguen sufriendo hoy en día, es que se necesita la potencia de un ordenador para funcionar. Conectado a través de un cable, el usuario puede disfrutar de la realidad virtual que se está procesando en la computadora, sin embargo, esto no es lo más adecuado, ya que nuestros movimientos de libertad terminan rápidamente revelados en cuanto tocamos o sentimos el cordón umbilical, nombre al que se le conoce a este cable de conexión.
Este cable es necesario en equipos de alta gama que procesan mucha más información y necesitan reproducir juegos o experiencias de alto contenido gráfico con la ayuda de un PC potente, pero poco a poco se está encontrando un equilibrio que permite ofrecer total libertad al usuario, y un ejemplo son las Oculus Quest.
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Libertad sin cables
Estas gafas de Oculus funcionan como si fuera un visor con un teléfono móvil incorporado, ya que son ellas mismas las que procesan todo lo necesario para dar vida a la experiencia virtual sin necesidad de ningún otro ordenador o equipo adicional. Con estas gafas podremos movernos por una habitación de manera física para movernos de igual manera en la realidad virtual, algo que se siente extremadamente real y que deja con la boca abierta a todo aquel que lo prueba por primera vez.
Además, con la ayuda de unos controladores equipados con sensores de movimiento, podremos llevar el movimiento y orientación de nuestras manos dentro de la experiencia, por lo que podremos tocar e interactuar con lo que estemos viendo como si estuviéramos realmente allí.
Una realidad virtual muy real
Con el hardware que permite introducirnos en la realidad virtual, lo siguiente es el software, y es ahí donde entra el trabajo de muchos desarrolladores. Podremos, por ejemplo, visitar lugares espectaculares del mundo y poder ver todo lo que nos rodea con sólo girar la cabeza. Un ejemplo es el de Rebuilding Notre Dame, que se encuentra en plena fase de reconstrucción tras el fatídico incendio. Esta experiencia nos trasladará al interior de la catedral.
Si prefieres las emociones fuertes (y temperaturas más bajas), también podrás escalar el Everest. En Everest VR: Journey to the Top of the World acompañaremos a una expedición a subir al pico más alto del mundo.
Pero si lo que quieres es vivir tu propia aventura, con National Geographic Explore viviremos una expedición virtual en primera persona, pudiendo descubrir el Machu Pichu o la Antártida.
En la realidad virtual también se juega
Otro de los usos que le podemos dar a la realidad virtual está relacionado con el ocio. Existen infinidad de juegos que nos permiten introducirnos en un contexto completamente inimaginable, y todo sin movernos de la silla. Un ejemplo magnífico es el de Eleven Table Tennis, un juego de ping-pong que nos permite jugar contra otra persona de cualquier parte del mundo casi sintiendo que la tenemos frente a nosotros. Además, gracias a los controladores, podremos golpear la pelota con la pala como si estuviéramos jugando realmente al ping-pong.
También podremos hacer ejercicio si el cuerpo nos lo pide. En Box VR disfrutaremos de entrenamientos personalizados basados en Fitboxing que tendremos que ir completando con movimientos y golpes en el aire mientras aguantamos el ritmo. Muy recomendable para quemar calorías.
A medida que los sistemas de realidad virtual mejoran, las posibilidades aumentan exponencialmente. A día de hoy existe una gran cantidad de aplicaciones y experiencias que permiten aprovechar los visores como nunca antes se había hecho, por lo que la manera en la que consumimos los contenidos está cambiando hacia un entorno virtual que cada vez luce menos futurista y más de nuestro presente.
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