El aceite de oliva 'muere' de éxito y de frío
Jaime Quirós – Un tsunami se cierne sobre el aceite de oliva y otros vegetales y hortalizas. La sacudida ha afectado a calabacines, berenjenas y alcachofas y ahora le llega el turno al oro verde líquido. Un clima extremo y exigente y una demanda creciente explican a grandes rasgos este fenómeno.
Desde el mercado mayorista y el Ministerio de Agricultura afirman que los precios están volviendo paulatinamente a la normalidad. En el caso de la alcachofa, Grecia, Italia e Israel, otros países proveedores, vieron perder sus cosechas por las nevadas y España se convirtió en una despensa alternativa. Pero los temporales que sacudieron Alicante, Murcia y Almería añadieron más tensión al mercado y menguaron la cosecha en un momento de gran demanda exterior. La semana pasada, en Reino Unido, varios supermercados comenzaron a racionar el número de lechugas y brócolis por cliente y el tabloide The Sun incluso culpó a los productores, injustamente, de esconder el producto.
Pero solo en España, primer productor mundial de aceite, la cosecha ha caído un 40%. Mientras que en Italia, el segundo, una plaga de Xylella ha arrasado más de un millón de olivos y de la que se han detectado casos aislados en Islas Baleares.
Como resultado, estos días el precio de los vírgenes extra repuntan un 0,44% y se sitúan en los 3,74 euros por kilo y los lampantes de menor calidad ganan casi un 2% y se pagan ya a 3,55 euros por kilo. Solo los aceites de oliva vírgenes se deprecian un ligero 0,25% y se quedan en 3,62 euros por kilo, de acuerdo con la misma fuente.
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Las cotizaciones en origen, que marca España, también están repuntando en el resto de los países mediterráneos, como Italia, que sólo en diciembre pasado había producido un 85% menos interanual. Del 30 de enero al 5 de febrero de 2017, este país experimenta una nueva subida generalizada en todas las categorías respecto a la semana anterior, de forma que los vírgenes extra se pagan ya a 5,85 euros por kilo; los lampantes a 3,05 y los vírgenes a 3,88 euros. En el último año, los valores de los distintos tipos de aceite de oliva han repuntado entre el 19,3 y el 58,1%, según cuenta Valenciafruits.com. En Grecia, los vírgenes extra oscilan entre los 3,31 y los 3,85 euros por kilo; y en Túnez van de los 4,08 a los 4,25 euros.
El aceite se está convirtiendo en un bien cada vez más valioso por su escasez, mientras la demanda repunta por el creciente reconocimiento de sus cualidades culinarias y el tirón del consumo que viene de Estados Unidos, China y otros países emergentes. Los productores españoles están viéndose obligados a tirar de sus reservas para cumplir con los pedidos de exportación, incluidos los de EEUU.
Y pese a este contexto idílico para un productor, muchos aceiteros españoles siguen vendiendo a granel el líquido alimento -en muchas ocasiones a los mayoristas italianos- en vez de envasarlo y venderlo con marca y denominación propia en el mercado.
IDNet Noticias