Yahoo Finanzas ¿Cuánto les costarán los nuevos aranceles de Trump a los hogares estadounidenses?
Es probable que la nueva ronda de aranceles que el presidente Donald Trump impuso a China en mayo le cueste a cada hogar estadounidense varios cientos de dólares.
Usando los datos de los costes aplicados a los impuestos a los consumidores en 2018, los economistas de la Reserva Federal de Nueva York estimaron que el costo anual aumentó a 831 dólares este año desde los 419 dólares de la última ronda de aranceles que se aplicó el año pasado. Agregaron que “es probable que unos aranceles más altos generen grandes distorsiones económicas y reduzcan los ingresos arancelarios de Estados Unidos”.
Los aranceles de Trump sobre los productos chinos que entraron en vigor el 10 de mayo, pasando del 10 al 25%, generan un aumento de los costos por dos conceptos: la carga fiscal adicional que enfrentan los consumidores y una pérdida de eficiencia o peso muerto.
La carga fiscal adicional
La “carga fiscal adicional” se refiere al costo añadido que los compradores estadounidenses de bienes importados deben pagar para cubrir el coste de los aranceles.
Los economistas de la Reserva Federal de Nueva York dijeron que la magnitud de estos costos dependerá en última instancia de “cómo el arancel afecte los precios que cobran los exportadores extranjeros y la demanda de bienes importados de Estados Unidos”.
Dado que los exportadores chinos no redujeron sus precios, se apreció que un arancel del 10% reduce la demanda de importación en un 43%, lo que significa que los compradores estadounidenses de importaciones ahora pagan un “impuesto de importación” sobre el precio base.
Este costo adicional luego se transfiere del comprador al consumidor, quien termina pagando más.
Pérdida de peso muerto
El segundo componente, llamado “pérdida de peso muerto” se refiere a las empresas que tienen que pasar de confiar en los productos chinos a buscar fuentes relativamente más baratas, pero menos eficientes. Esto crea una “pérdida de peso muerto o de eficiencia”.
Por ejemplo, si una empresa ha estado confiando en las importaciones chinas, que les han costado 100 dólares, un arancel del 10% eleva ese precio a 110 dólares.
Si esa compañía quiere ahorrar costes y elige una opción más barata simplemente para suprimir los costos y termina decantándose por una empresa menos eficiente que ofrece el mismo producto a 109 dólares, igualmente tendrá que asumir el aumento de 9 dólares en el precio en la cadena de suministro. Y “la teoría económica indica que las pérdidas de peso muerto tienden a aumentar proporcionalmente a medida que se incrementan los aranceles porque los importadores están obligados a cambiar a fuentes de suministro cada vez más caras a medida que aumentan los aranceles”, agregaron los investigadores.
La estimación de 831 dólares, añadieron, se basaba en una situación en la que las importaciones de China pueden sustituirse por completo con otros proveedores extranjeros o incluso detenerse del todo.
En sentido general, “nuestros resultados indican que los ingresos arancelarios que ahora está recaudando Estados Unidos no son suficientes para compensar las pérdidas generadas por los consumidores de importaciones”, concluyeron en su estudio de los aranceles de 2018.
Otras evaluaciones
Las evaluaciones de la Reserva Federal de Nueva York no son las únicas que prevén problemas para los estadounidenses.
Un estudio de Trade Partnership Worldwide examinó cuatro escenarios diferentes relacionados con los aranceles.
Su escenario base se refiere a los aranceles sobre el acero y aluminio vigentes, tarifas del 25% sobre las importaciones estadounidenses de productos chinos y los aranceles de represalia que ha aplicado el gobierno chino. “Una familia estadounidense de cuatro integrantes tendrá que desembolsar 767 dólares adicionales para pagar los costos más elevados de los bienes y servicios derivados de esos aranceles, por cada año que estén en vigencia”, indicó el estudio. También prevé un “impacto neto único” en los empleos de Estados Unidos, que equivaldría a la pérdida de 934.700 puestos de trabajo, y agrega que cada estado experimentará pérdidas netas de empleos.
El segundo escenario parte del escenario base, pero tiene en cuenta además los aranceles de represalia de China y los aranceles del 25% sobre las piezas de automóviles importadas de países como Canadá, México, la Unión Europea, Corea y Japón. Según estos cálculos, una familia de cuatro personas pagaría 902 dólares adicionales al año y se perderían 1.040.200 empleos.
El escenario No. 3 analizó el impacto del escenario base, pero en vez de considerar las importaciones de automóviles, tuvo en cuenta los aranceles estadounidenses del 25% a las importaciones restantes de China, así como las represalias del gobierno. Esto representaría un impacto anual de 2.294 dólares para una familia de cuatro personas.
El último escenario combinó los tres anteriores y encontró que le costaría a una familia de cuatro personas 2.389 dólares al año y tendría un impacto neto único de 2.235.400 empleos perdidos en Estados Unidos.
Politico reportó un estudio diferente realizado por el Instituto Peterson para la Economía Internacional, que encontró que “los aranceles a China equivalen a un aumento de impuestos de alrededor de 550 dólares por cada familia estadounidense”. Además, si los aranceles del 25% superaran los 500 mil millones de dólares en importaciones chinas, podrían conducir a un aumento de 2.200 dólares en una familia de tres personas, según Politico.
“Va a ser muy doloroso”
Aunque estos estudios indican un número real del impacto de los aranceles, no es la primera vez que se pone de relieve su efecto sobre los consumidores.
Tras quedar claro que Estados Unidos no pudo llegar a un acuerdo comercial con China, la Federación Nacional de Minoristas y la Asociación de Distribuidores y Minoristas de Calzado de América expresaron su preocupación haciendo hincapié en que un aumento de los aranceles conducirá a un incremento de los costes para los consumidores.
“Los impactos de la disputa comercial con China, sobre todo si se produce un efecto bola de nieve, se harán sentir y serán muy dolorosos”, le dijo a Politico Beth Ann Bovino, economista jefe de Standard & Poor's en Estados Unidos.
