Anuncio
Mercados españoles cerrados
  • IBEX 35

    11.154,60
    +170,90 (+1,56%)
     
  • Euro Stoxx 50

    5.006,85
    +67,84 (+1,37%)
     
  • Dólar/Euro

    1,0703
    -0,0030 (-0,28%)
     
  • Petróleo Brent

    89,50
    +0,49 (+0,55%)
     
  • Oro

    2.351,80
    +9,30 (+0,40%)
     
  • Bitcoin EUR

    59.783,93
    -593,34 (-0,98%)
     
  • CMC Crypto 200

    1.332,72
    -63,82 (-4,57%)
     
  • DAX

    18.161,01
    +243,73 (+1,36%)
     
  • FTSE 100

    8.139,83
    +60,97 (+0,75%)
     
  • S&P 500

    5.102,30
    +53,88 (+1,07%)
     
  • Dow Jones

    38.268,68
    +182,88 (+0,48%)
     
  • Nasdaq

    15.918,87
    +307,11 (+1,97%)
     
  • Petróleo WTI

    83,87
    +0,30 (+0,36%)
     
  • EUR/GBP

    0,8562
    -0,0012 (-0,14%)
     
  • Plata

    27,33
    -0,02 (-0,08%)
     
  • NIKKEI 225

    37.934,76
    +306,28 (+0,81%)
     

Take Eat Easy: una historia de héroes y villanos

La semana pasada la startup de reparto de comida a domicilio Take Eat Easy (la del slogan “Los mejores restaurantes en la puerta de tu casa”) echaba el cierre por falta de financiación. Nada nuevo en el mundo del emprendimiento. Pero los hermanos Roose promotores de la idea se hacían querer publicando en varios sitios de Internet las bondades de su proyecto y aseguraban que el negocio era viable con una salvedad: no habían logrado la masa crítica suficiente para ser rentables.

Los culpables eran los inversores, que les habían dejado a la intemperie. Una verdad a medias. El cierre les ha dejado en deuda con los restaurantes (a algunos les deben hasta 80.000€) y los empleados, que se han quedado en el limbo laboral.

El 22 de julio la filial española publicaba en su Facebook “¿Te vas de vacaciones? ¿De fin de semana? Estamos preparándote el bocadillo para que no te vayas sin comer.” Y cuatro días después la despedida, con un lacónico “la carta de nuestro CEO, Adrien, para explicar la situación”. Un texto largo y lleno de explicaciones sobre los logros de una compañía que nació en 2013 con el objetivo de que los restaurantes de calidad pudieran servir comida a domicilio y cerró con éxito dos rondas de financiación.

La escalada de éxitos que describe Adrien Roose se resume así: en los doce últimos meses Take Eat Easy ha pasado de tener presencia en 2 ciudades a 20, de 450 restaurantes asociados a 3.200, de 10 empleados a 160 y de una base de clientes de 30.000 a 32.000.

image


¿Por qué ha fallado un negocio tan genial? El emprendedor Roose explica que “1) nuestros ingresos no cubren nuestros costos y 2) no hemos sido capaces de levantar una tercera ronda de financiación.” Lo de siempre.

ANUNCIO

El modelo de negocio de la empresa era bastante sencillo, como explica el propio Adrien. En cada pedido se cargaba al restaurante una comisión del 25-30% y una tarifa de entrega de 2,5 euros, lo que genera unos ingresos medios de 10 euros por pedido.

Mientras Take Eat Easy ponía en marcha su tercera ronda de financiación, uno de sus socios inversores decidió apostar por su competidor Foodora y otro de sus grandes competidores –Deliveroo –cerró con éxito una ronda de financiación importante. Mal camino. En marzo de 2016, después de haber sido rechazados por 114 fondos de capital riesgo, un fondo francés se comprometió a invertir 30 millones de euros en el proyecto, pero apenas tres meses después desistió. Había un pacto de exclusividad y los Roose no tenían plan B.

Si dentro de unos años los Roose vuelven con otra startup y ponen el típico acento romántico de que en el desastre de Take Eat Easy aprendieron mucho, alguien debería recordarles que su tropiezo tuvo víctimas colaterales: las familias de los empleados y los restaurantes que confiaron en ellos y les dieron crédito.

IDNet Noticias