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Adiós a las indemnizaciones millonarias en la banca y empresas públicas

La nueva reforma laboral del Gobierno de Rajoy no solo va a tocar a los trabajadores de a pie. Desde Génova son conscientes del daño que han hecho de cara a la opinión pública las indemnizaciones de muchos altos cargos, y ha sacado por ello la tijera con un límite para altos cargos de entidades financieras y empresas públicas.

[Relacionado: Las pensiones millonarias más irritantes de España]

Así lo ha anunciado la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, tras el Consejo de Ministros de este viernes. A partir de ahora y mediante este proyecto de ley, los directivos de la banca no podrán tener derecho a una indemnización superior a dos años de remuneración fija o correspondiente a dos veces las bases máximas resultantes de los límites fijados recientemente por el Gobierno (600.000 euros, y 300.000 euros para aquellas entidades que han sido intervenidas). A su vez, si estos altos cargos han sido sancionados o expedientados previamente, no tendrán derecho a ninguna indemnización.

Por otra parte, los directivos de empresas públicas solo tendrán derecho a siete días por año trabajado con un límite de seis mensualidades, a no ser que sean funcionarios: en ese caso, volverán a su plaza sin cobrar tampoco ni un céntimo.

El Gobierno pretende con esto evitarse casos como el de Caixa Galicia, donde cuatro de sus ex directivos cobraron 25 millones de euros en concepto de indemnizaciones, un año después de que la caja negociara un ERE con 1.2oo empleados prejubilados y 100 millones de euros ahorrados. Bienvenida sea la medida.