Yahoo Finanzas Nueva subida de impuestos: el recargo “temporal” sobre el IBI se eterniza
El IRPF, el IVA, las tasas, el IBI, los impuestos sobre alcohol, tabaco, aire acondicionado, generación eléctrica, las tasas aeroportuarias o el nuevo certificado energético… Es inacabable la lista de impuestos y tasas que ha subido o creado el Gobierno desde que llegó al poder. Y por si eran pocas, se acaba de aprobar una subida más: prorrogar el recargo especial en el Impuesto de Bienes Inmuebles hasta 2015, un año más de los que estaba previsto con el objetivo de reflotar los ayuntamientos, cuya situación económica es catastrófica. Esta prórroga debería reportar a las arcas del Estado unos 700 millones al año que tendrán que pagar religiosamente miles de ciudadanos.
El Gobierno había anunciado en 2012 que ese recargo, que afecta sobre todo a los ayuntamientos que no han realizado en los últimos años revisiones catastrales -aunque también al resto- , se aplicaría solo en 2012 y 2013, algo que no se ha cumplido, como ha pasado con la subida "transitoria" del IRPF. La aplicación del impuesto sobre inmuebles había sido extendida hace poco tiempo hasta 2014 y ahora se prolonga un año más. ¿Será la última prórroga?
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Esta medida se une a las últimas subidas fiscales aprobadas por el Consejo de Ministros de la semana pasada, como la subida de Impuestos Especiales, la creación del nuevo impuesto medioambiental y los cambios para endurecer la tributación de las grandes empresas. En el caso de la nueva imposición sobre el alcohol y el tabaco supone la elevación de su tributación un 10%, aunque quedan excluidos de esta subida los impuestos al vino y a la cerveza.
Este conjunto de cambios fiscales anunciados por el Gobierno la semana pasada aportarán en teoría a las arcas del Estado unos 1.000 millones este año y 4.840 millones al año a partir de 2014, cuando las medidas estén plenamente vigentes. Habrá que ver su efecto real, ya que pese a la batería de subidas fiscales que Rajoy ha aplicado desde 2012, la recaudación de impuestos muestra preocupantes síntomas de debilidad que el Gobierno achaca al creciente fraude.
Tan es así, que por exigencia de Bruselas y bajo la presión de los expertos, el Gobierno prepara un cambio total del sistema tributario para conseguir taponar las fugas que impiden al sistema recaudar en línea con la media de los países de Europa pese a que formalmente sufrimos los impuestos más altos de casi toda la Unión Europea. Ese nuevo sistema impositivo verá la luz en primavera.
Pero como la necesidad aprieta, no habrá que esperar muchos días para conocer nuevos rejonazos fiscales del equipo de Rajoy. En unos días estará a punto el proyecto de reforma energética y en él se incluirán previsiblemente nuevos impuestos y nuevos incrementos del precio de la luz, sobre todo a las segundas viviendas.
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