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Lo que necesitarás durante toda tu vida para tener un empleo

Encontrar trabajo es una tarea complicada hoy día, no sólo en España, sino en cualquier país occidental. La globalización y la tecnificación de todas las actividades están provocando un cambio brutal en la maneras de conseguir o mantenerse en un empleo y conviene estar al tanto del cambio que sufren estos procesos.

La clave, según el consenso creciente de los expertos es la formación continua a lo largo de toda la vida laboral. El aprendizaje y la capacitación constante han dejado de ser un consejo de un familiar o amigo bienintencionado para convertirse en una auténtica obligación para mantener o encontrar un empleo.

Si analizamos el paro juvenil, por ejemplo, vemos que el colectivo afectado está dividido en dos bloques, con unas tasas de desempleo muy diferentes. Por un lado desde que se inició la crisis casi el 75% de los empleos destruidos corresponden a personas con menor nivel educativo (primaria o secundaria) mientras que aquellas personas que disponían de un título superior solo se han visto afectados en un 0,1%. Esto es algo lógico, ya que la construcción era la principal empleadora de mano de obra poco cualificada que dejaba los estudios a temprana edad atraída por unos altos sueldos.

[También de interés: Sí hay otro modelo, hay países que suben salarios para salir de la crisis]

Es curioso, porque las autoridades europeas y españolas ponen el acento en la necesidad de desarrollar la formación profesional para contar con jóvenes cualificados para ejercer oficios, y reducir el elevado peso de estudiantes universitarios que se registra en algunos países, como España. Países donde muchas de esas licenciaturas no tienen salidas en el mercado laboral. ¿Cómo se conjugan esas directrices políticas con la opinión de los expertos?

Los expertos, sin embargo, insisten cada vez más en la necesidad de la formación de por vida. En la Semana de la Educación, que organiza la Fundación Santillana, se ha constatado esta necesidad de puesta al día vitalicia. Mariano Fernández Enguita, catedrático de Sociología en la Universidad Complutense, ha puesto el énfasis en la desigualdad, por ejemplo, de oferta de cursos que proponen las empresas. “No basta con tener una cualificación, sino que esta no la tengan chinos o indios. Y el problema es que la formación a cargo del empleador es seis veces mayor para los universitarios que para quienes apenas tienen estudios de primaria”, según recoge el diario El País. Y no solo hay más oferta, sino también más demanda de cursos de los licenciados. “Cuanto más formada está la gente más se forma. Antes la llamábamos formación de segunda oportunidad. Pero hoy, cuando vas a por ella, la gente está aprovechándose de la tercera o cuarta”.

Otro dato inapelable: en España hay el doble de empleos para personas formadas que para quienes no lo están. “A mayores competencias más empleo. También porque la persona es capaz de servirse de más herramientas, como la Red, para encontrar trabajo”, argumenta Marta Encinas, que trabaja en el conocido como Pisa de Adultos (PIAAC).

De cara al futuro, la tendencia es clara: el cupo de trabajos sin formación va a ir reduciéndose. “No solo porque se lleven las industrias a India o China, sino porque también muchos procesos se automatizan. Aunque algunos trabajos, como el de conductor de autobús o peluquero, van a seguir existiendo”, sostiene la analista de la OCDE. “Alguien con estudios tiene posibilidad de ganar salarios tres veces más altos que quien no los tiene y eso debería de ser un incentivo para formarse. También goza de una salud tres veces mejor”.

En resumen, formación para los oficios y formación para los licenciados. Y sobre todo orientar a los estudiantes de secundaria hacia profesiones y carreras que tengan una utilidad en el actual tejido productivo. Y por qué no, eliminar o reducir aquellas disciplinas académicas que se han quedado trasnochadas.

IDNet Noticias

@Jorcha