Yahoo Finanzas La última bala del Gobierno para reactivar el empleo
El Gobierno se afana en acabar de definir entre hoy y mañana el proyecto de presupuestos generales para el año que viene, que incluye fuertes recortes de gasto y reformas para intentar calmar el recelo de los acreedores europeos y de los mercados. Esto es lo urgente. Pero al mismo tiempo trabaja para intentar superar la principal lacra que sufre el país: el empleo. Para ello ha puesto el foco en la actividad con más capacidad de arrastre de la economía y a la vez la más castigada por esta crisis: la construcción.
No es el primer Gobierno que lo intenta, pero la gravedad de la situación y la falta de un modelo productivo alternativo que permita a España recuperar su pulso económico ha propiciado que Rajoy se proponga impulsar la actividad constructora a través de la rehabilitación de los millones de edificios y viviendas que están en malas condiciones. La construcción ha perdido la friolera de un millón de empleos a lo largo de esta crisis y genera el 37% de los parados europeos en esta actividad. Si exceptuamos el turismo, no hay ningún otro sector en el país que pueda generar empleo de forma masiva.
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¿Cómo se puede movilizar la construcción? Casi todas las infraestructuras que necesita España ya están hechas, no hay dinero público para nuevas inversiones, solo para pagar deudas, y contamos con un millón de viviendas vacías, todavía sin vender.
No hay más alternativa. Restaurar los millones de viviendas viejas o equipar las que no están al día es una oportunidad para dar trabajo a miles de personas en la construcción y en los sectores auxiliares, reactivar la economía a corto plazo, mejorar el ahorro energético y el cuidado del medio ambiente.
Rajoy quiere articular el plan a través de una Ley de Rehabilitación, la primera, y renovar ese parque de viviendas obsoletas. De los 25 millones de pisos que hay en España, la mitad tiene más de 30 años, y una quinta parte, más de 50 años. Y en esta materia estamos a la cola de Europa, donde la rehabilitación genera el 41% de la actividad del sector de la construcción mientras en España supone el 26%, según datos del Ministerio de Fomento.
¿Es necesaria una ley para impulsar este negocio? Es posible, pero la clave para lograr un verdadero estímulo constructor es facilitar la financiación, ofrecer más ayudas fiscales y al mismo tiempo lograr que aflore la economía sumergida que suele anidar en este tipo de obras. Acabar con el "¿con IVA o sin IVA?". A lo mejor de paso arreglamos el problema del déficit público.
