El sonrojante error de una marca de tampones
El desarrollo de concursos a través de redes sociales se ha convertido en algo habitual para las marcas, que buscan así una manera de ganar seguidores ofreciendo atractivos premios. A los participantes se les suele pedir que escriban algo, que suban una foto o que graben un vídeo. Pero nunca antes se les había pedido que se inmortalizaran con un elemento tan íntimo como un tampón.
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Aunque a primera vista puede parecer un montaje, se trata de un caso real que ha ocurrido en México. La polémica mecánica de la promoción ha generado un aluvión de críticas y burlas hacia la empresa organizadora del concurso, la marca de productos de higiene femenina Saba.
La compañía buscaba promocionar sus nuevos tampones llamados Estilos, ofreciendo a sus compradoras la posibilidad de ganar un iPad. Sin embargo, una deficiente redacción de los textos del concurso dio lugar a un sonrojante malentendido sobre lo que tenían que hacer para llevarse el premio.
"¡Tómate una foto con los nuevos tampones Estilos con aplicador largo y gana una iPad... pasa la voz, tu foto debe tener mucho estilo!", rezaba el anuncio colgado en su página de Facebook. La confusión era evidente, ya que parecía darse a entender que las mujeres tenían que inmortalizarse utilizando el tampón. Pocos minutos después de lanzarse la promoción, el escándalo ya estaba montado en la Red…
Los usuarios, que no suelen perdonar una, llenaron los perfiles digitales de la marca de comentarios en tono de sorna y montajes fotográficos con la menstruación como protagonista. Saba no debió haber valorado hasta ese momento el riesgo que corría lanzando un concurso sobre un producto de uso tan íntimo, y mucho menos percatarse de la interpretación que iba a hacerse de su polémico texto promocional.
Su primera reacción quizá no fue la más apropiada. La marca publicó un mensaje en su página de Facebook en el que, lejos de asumir su error, culpaban a los usuarios del escándalo organizado sobre "un tema que es natural para las mujeres". Poco tiempo después rectificaron y asumieron que todo se había debido a "un error de redacción que dio pie a un penoso malentendido".
No se puede saber cuánto habrá afectado esta polémica a la reputación de la compañía, pero si se deciden a lanzar una nueva promoción seguramente revisarán hasta la última coma de los textos promocionales. Aunque un 'patinazo' le puede ocurrir a cualquiera, está claro que estas situaciones dejan siempre huella.