Primer viernes de marzo, se abren las puertas del Templo de Medinaceli
Primer viernes de marzo, y por fin se abren las puertas para miles de personas que están esperando por una sola razón: por el Cristo de Medinaceli. Aunque algunos no solo esperan para besar al Cristo, también para ver a Doña Sofía, la reina. Todos los años desde hace siglos se repite esta tradición no apta para impacientes. Los que salen no tienen ninguna duda, para ellos merece la pena.