Pep trata de quitar hierro a la dimisión de su equipo médico

El Bayern de Múnich ha vuelto este viernes a los entrenamientos después de la sorprendente derrota en Do Dragao contra el Oporto en la ida de los cuartos de final de la Champions League. El equipo de Pep Guardiola no pasa por su mejor momento ni mucho menos. Y no solo se trata de la plantilla, asolada por una plaga de lesiones que tiene en el dique seco a nombres como Ribery o Robben, sino también del cuerpo técnico. En el último partido de Bunesliga contra el Bayer Leverkusen, Benatia se retiraba lesionado. Guardiola, muy contrariado, la tomó con uno de los médicos del club al que empezó a aplaudir en su cara. El galeno no lo dudó y abandonó el banquillo, para día después, dimitir en pleno junto al resto del cuerpo médico. La afición no entiende cómo se han precipitado los acontecimientos. "Creo que es una verdadera pena. El médico hizo un enorme trabajo dentro del club durante los 38 años que ha estado aquí. Se ha ido todo el cuerpo médico por lo que creo que será dificil rellenar el hueco. Habrá mucho trabajo y será complicado", explica un hincha del club bávaro. Pep ha querido quitar hierro al asunto y concentrarse en lograr la remontada el próximo martes en el Allianz Arena en la Liga de Campeones. -Redacción-