De la noche más cálida a tormentas de granizo
A Christian y a Natalia la tormenta les pilló por sorpresa, como a todos. Consecuencia de una tormenta con rachas de viento de hasta 90 kilómetros por hora que derribó árboles y obligó a improvisar refugio. En apenas unos minutos el cielo se oscureció, se iluminó y descargó con fuerza. En el interior, el protagonista fue el granizo. Con bolas de hielo que dejaron cicatrices en los cristales de Requena y Jalance. Hoy toca hacer balance de una jornada en la que la única nota positiva fue la bajada de temperaturas. Gracias al cielo, que por fin nos ha dejado conciliar el sueño. Un alivio que va a durar poco... Y ojo, porque por la tarde puede volver a llover. -Redacción-