Ignacio González denuncia una campaña de acoso y derribo contra su persona para dinamitar su candidatura en las autonómicas

Ignacio González sigue con su agenda, hoy, inauguración de un centro para la prevención de las adicciones pero a la salida, el único tema por el que se han interesado los periodistas ha sido su elección, o no, como candidato y su ático en Estepona. González se ha referido entonces a las declaraciones hechas esta mañana en Onda Cero en las que ha comentado que está "totalmente indignado, absolutamente indignado, por esta campaña brutal de acoso y derribo que se lleva haciendo contra el para evitar que sea designado candidato". Y es que la designación de candidato continúa en el aire. Rajoy no ha tomado aún la decisión, ayer evitaba pronunciarse. Un silencio que González no ve como una falta de apoyo del presidente, en su entrevista radiofónica decía: "Yo creo que esto lo lleva diciendo el señor Rajoy, no en este caso, en todos los casos de todas las candidaturas" Pero el caso es que el ático de Estepona le está complicando la vida. Policías que lo acusan de intentar tapar la investigación sobre cómo y quién lo compró, González que acusa de chantaje a los policías y un comisario que lo denuncia por injurias, y que implica en el asunto al Presidente del Átletico de Madrid, que esta mañana también intervenía en Onda Cero para decir que él no sabe nada de este asunto, aunque reconoce que se reunión con el comisario Villarejo, a petición del policía, según Cerezo, y que este le pidió que le dijera a González si podía parar las investigaciones contra él y contra el comisario que inició la investigación del ático de González en la comisaría de Marbella. El ático de Estepona lo compró una sociedad desde el paraíso fiscal de Delaware a través de un testaferro, que trabaja a su vez para una de las filiales de EGEDA, empresa de Cerezo, y el comisario Villarejo apunta en su denuncia a González que fue Cerezo el que pagó la vivienda, que fue comprada más tarde por González y su mujer. El asunto llegó hasta el Supremo, que archivó la causa, pero se la devolvió al tribunal de Estepona para que siguiera investigando.