Francisco recibe a Castro en el Vaticano

Aunque el encuentro ha tenido carácter privado, ha suscitado una considerable expectación. 55 minutos de reunión, y además sin necesidad de traductores, han dado para mucho. Incluso para alguna broma durante la presentación de la delegación que acompañaba a Raúl Castro. Éste ha alabado así la profesionalidad de la secretaria de su ministro de Exteriores. RAÚL CASTRO, presidente de Cuba: "Es muy efectiva. Se la voy a quitar al canciller". Y Francisco ha recordado el gusto del embajador cubano por un tipo de dulces de su país. PAPA FRANCISCO: "Le gustan los alfajores argentinos". Se han puesto más serios a la hora del intercambio de regalos, porque el de Castro, este cuadro de un artista cubano, alude al drama de la inmigración en el Mediterráneo, tantas veces denunciado por Bergoglio. La reunión en el Vaticano se produce a cuatro meses del viaje papal a Cuba previsto para septiembre. Con cada vez menos obstáculos en su alejamiento del ostracismo internacional, Castro espera que para entonces el Congreso de Estados Unidos haya sacado a la isla de la lista de países terroristas. En el deshielo de las relaciones entre la Habana y Washington, mucho tuvo que ver la mediación del pontífice, y así lo reconocieron en su día tanto Obama...como Castro... Hoy el cubano ha agradecido personalmennte a Francisco su contribución a ese acercamiento.