Eternamente agradecidos
El sueño de todos llegaba a España. Nuestro trofeo, nuestro ídolo, nuestra historia. "Ha sido el partido de baloncesto más visto de la historia", afirmaba el presidente del gobierno. Rajoy era el primero en felicitarles y darles las gracias "por hacer feliz a tanta gente sin pedir nada a cambio. Gracias". El gracias multitudinario lo recibían en la Plaza de Callao, donde encontramos aficionados emocionados con nuestros extraterrestres. Pau Gasol enloquecía al público asegurando que "vivir este momento y compartirlo con todos vosotros es una maravilla y un sueño". Un país orgulloso de nuestro baloncesto.