El nueve por ciento de los padres son víctimas de violencia física por parte de sus propios hijos

Cuando el enemigo está en casa, cuando el tirano es el propio hijo adolescente, cuando lo que sorprende es que no son excepciones... El año pasado hubo 5.600 denuncias de padres a sus hijos por agresiones verbales y físicas. Es más del doble que hace unos años. Toman el poder con 12 o 13 años, y con la edad empeora. Difícil que los padres denuncien. Difícil por vergüenza, sería algo así como admitir que se ha educado mal. Los casos ocultos son muchos más que los denunciados. Uno de cada diez padres son víctimas de violencia física, y hasta el 40 por ciento psíquica. El origen suele seguir un patrón: sobreprotección, consentimiento y lo que los expertos llaman la "familia democracia", el error de educar desde la igualdad, sin la autoridad de un adulto. -Redacción-