El 'efecto pluma-cohete' del precio de los carburantes
Desde hace siete semanas, el precio del petróleo no deja de subir y los carburantes marcan ahora máximos anuales sin intención de frenar su tendencia alcista. El consumidor padece el llamado 'efecto pluma- cohete': cuando el petróleo sube, los precios de la gasolina se disparan hacia arriba, mientras que cuando bajan no ocurre igual y se abaratan mucho más despacio. El barril de crudo, que a mediados de 2014 llegó a caer de los 50 dólares, desplomado en los mercados internacionales, comenzó a subir a partir del 14 de enero. Un incremento en los surtidores en tan sólo dos meses de más de un 8% que obliga a pagar como poco seis euros más para llenar los depósitos. Y aún así en España el importe medio de ambos carburantes sigue en nuestro país por debajo tanto de la media de la Unión Europea como de la zona euro. -Redacción-