¿Tope al precio de la gasolina? Francia intenta poner el litro a 1,5 euros
La guerra en Ucrania ya cumple cinco meses y uno de sus efectos más evidentes ha sido el aumento de precio de los productos, llevando la inflación a niveles cercanos al 10% en la Unión Europea.
El problema viene principalmente del sector energético y la subida de los carburantes ha hecho que en la mayoría de naciones del continente se superen los dos euros por litro, una cifra inimaginable hace apenas unos meses, pero que ha encarecido sobremanera el coste de llenar el depósito.
Esta situación ha provocado la intervención de los Gobiernos para intentar evitar un golpe de tal magnitud en los bolsillos de los consumidores. Por ejemplo, en España está presente desde hace algunos meses un descuento de 20 céntimos por litro que permite ahorrar unos cuantos euros en la factura final.
Sin embargo, Francia va a ir un poco más allá desde el 1 de septiembre, consiguiendo situar el litro en torno a 1,50 euros, frente a los 2 actuales. Al igual que España, el país galo actualmente bonifica los combustibles, en su caso con 0,18 céntimos de euro por litro, pero la cifra va a subir sensiblemente a partir de esa fecha, hasta los 0,30 euros.
La medida tendría validez durante dos meses (septiembre y octubre) y luego se reduciría en noviembre y diciembre hasta los 0,10 euros. A ella habría que sumar los 20 céntimos que las gasolineras Total ya están aplicando en numerosas estaciones de servicio, por lo que nos encontraríamos con un descuento combinado durante esos dos meses de 50 céntimos, haciendo fácil llevar el precio de los combustibles al euro y medio o incluso por debajo.
El gigante petrolero ha prometido una rebaja también de 0,2 euros entre septiembre y noviembre en las estaciones de servicio situadas en zonas rurales de Francia. Esto comprende a los municipios de menos de 6.000 habitantes, así como a los territorios de ultramar. Después, hasta final de año, el descuento se situará en los 10 céntimos. Esta medida viene tras las amenazas de imponerle a Total un impuesto a las superganancias.
Así pues, los franceses tienen la oportunidad de tener la gasolina mucho más barata que en la actualidad durante los meses de otoño y puede servir de referencia a otros países a aplicar tarifas similares para anticipar unos meses que se prevén muy duros como consecuencia de la crisis energética.
¿Y qué va a pasar de entonces? Parece claro que todavía quedan muchas incógnitas por resolver y que de momento las naciones de la UE van improvisando soluciones a medida que van ocurriendo los acontecimientos. Predecir cómo evolucionará la guerra ucraniana hasta finales de año es una cuestión imposible.
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