Yahoo Finanzas Seis motivos para llamar 'tercermundista' a Estados Unidos
Cuando Donald Trump lo mencionó en la campaña electoral, hubo risas. Hoy son varios los motivos para calificar a a la primera potencia mundial como país tercermundista, de acuerdo con un informe reciente de la BBC. Se basan en el desempeño de EE.UU. en comparación con otros países del mundo en asuntos tales como la esperanza de vida, la educación o los embarazos de adolescentes.
Varios indicadores de bienestar sitúan a los Estados Unidos a la cola de los países ricos e incluso a la zaga en algunos aspectos. Así, un estudio del Centro de Investigaciones Pew señala que una mayoría de los estadounidenses de clase alta y media opinan que “los pobres hoy tienen las cosas fáciles porque pueden recibir beneficios del gobierno sin hacer nada”. Nada que ver con lo que piensan dos tercios de los ciudadanos de bajos ingresos porque “los beneficios sociales no son suficientes para ayudar a tener una vida decente”.
El estudio de la BBC ha destacado seis indicadores que cuestionan el mito del bienestar en Estados Unidos. Junto a los citados arriba figuran la mortalidad infantil y materna y la tasa de homicidios.
De acuerdo con informes del Programa de la ONU sobre Desarrollo Humano, la esperanza de vida en Estados Unidos es de sólo 79,2 años, muy lejos de los 83,7 años de Japón y por cierto bastante inferior a las tasas de España e incluso de varios países latinoamericanos con una renta per cápita muy inferior. EEUU ocupa el puesto número 40 del mundo, pero el asunto no queda ahí porque la expectativa de vida de los estadounidenses se está reduciendo y, además, crece la distancia entre ciudadanos blancos y de color (80 frente a 66 años).
No mejora su posición al analizar la esperanza de vida infantil (puesto 44, por detrás de países como Cuba o Croacia), con el agravante de que en afroamericanos la tasa se asemeja más a la de países subdesarrollados como Togo. En conjunto, el 23,1% de los menores estadounidenses viven en hogares con ingresos medios por debajo del 50% de la media.
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Estados Unidos siempre ha sido un país de contrastes, pero sorprenden algunos datos que lo colocan en una situación bastante lamentable desde el punto de vista de los derechos humanos y de la protección de la infancia. Si hablamos de mortalidad materna, la tasa ha subido casi un 50% en cinco años, al pasar de 17,5 muertes por cada 100.000 nacimientos en 2000 a 26,5 en el año 2015. Cómo no, la tasa entre afroamericanas triplica a la de población blanca.
Algo parecido sucede con los alumbramiento de adolescentes (entre 15 y 19 años): 21 por cada 1.000 mujeres, muy lejos de países como Japón (4), Alemania (6) o España (8).
La facilidad de acceso a las armas y el crecimiento de los homicidios es el otro gran caballo de batalla de la sociedad americana. Trump no tendrá fácil defender sus teorías a favor de la tenencia de armas en un país con 4,88 muertos por cada 100.000 ciudadanos, dato que el sitúa en un vergonzoso puesto 59 del ranking mundial. Más aún si se tiene en cuenta que, a mayor nivel de pobreza, más muertes. En ciudades estadounidenses de más de 200.000 habitantes y con una pobreza de 25%, hay una media de 24,4 homicidios (cinco veces más).
A la vista de estos datos, habría que preguntarse si Estados Unidos es realmente un país de oportunidades para todos y si la integración racial sólo un tema recurrente en la fantástica industria de Hollywood.
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