Anuncio
Mercados españoles cerrados
  • IBEX 35

    10.729,50
    -35,50 (-0,33%)
     
  • Euro Stoxx 50

    4.918,09
    -18,48 (-0,37%)
     
  • Dólar/Euro

    1,0656
    +0,0010 (+0,10%)
     
  • Petróleo Brent

    87,21
    +0,10 (+0,11%)
     
  • Oro

    2.402,50
    +4,50 (+0,19%)
     
  • Bitcoin EUR

    60.267,88
    +811,99 (+1,37%)
     
  • CMC Crypto 200

    1.381,98
    +69,36 (+5,48%)
     
  • DAX

    17.737,36
    -100,04 (-0,56%)
     
  • FTSE 100

    7.895,85
    +18,80 (+0,24%)
     
  • S&P 500

    4.967,23
    -43,89 (-0,88%)
     
  • Dow Jones

    37.986,40
    +211,02 (+0,56%)
     
  • Nasdaq

    15.282,01
    -319,49 (-2,05%)
     
  • Petróleo WTI

    83,25
    +0,52 (+0,63%)
     
  • EUR/GBP

    0,8611
    +0,0056 (+0,65%)
     
  • Plata

    28,73
    +0,35 (+1,23%)
     
  • NIKKEI 225

    37.068,35
    -1.011,35 (-2,66%)
     

Del campo a la mesa: subidas espectaculares de precios de hasta el 1.100%

Qué pagamos por la fruta mucho más en tiendas o grandes superficies de lo que recibe el agricultor no es un secreto para casi nadie. La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), organización agraria profesional de ámbito estatal, ha publicado su último Índice de Precios en Origen y Destino de los alimentos (IPOD), en el que se detallan las subidas de cada tipo de fruta desde el agricultor al vendedor final.

Las diferencias son espectaculares: de media el precio de las frutas se multiplica por 5,66. La palma se la lleva el brócoli con una subida del 1.109%. Destacan también el pepino, con un incremento del 964%, el melón, con un 883%, el calabacín, 800%, o los ajos, con un 781% de diferencia porcentual.

[También de interés: Las opciones más baratas ante la subida del precio de la compra”]

Foto: una mujer compra en una frutería en Barcelona, España (AP / Manu Fernandez)
Foto: una mujer compra en una frutería en Barcelona, España (AP / Manu Fernandez)

Pero, ¿por qué son tan grandes los sobrecostes? Lógicamente, tiene que haber un incremento por el trabajo de transporte, almacenaje y distribución. Pero es muy desproporcionado. La gran cantidad de intermediarios en la cadena de producción va incrementando poco a poco el precio para que cada uno de los actores que participan se lleve su parte del pastel.

ANUNCIO

También hay otros tres elementos clave que influyen en los precios de la fruta: la climatología, los ciclos de plantación, en los que se siembra algo un año y se cambia al año siguiente, y la cantidad de importaciones y exportaciones que haya en cada momento del año. Y por supuesto, todo está regido por la ley de oferta y demanda, con subidas de los productos más deseados y bajadas en los menos queridos.

Lo que no es comprensible es que las subidas alcancen estas cuotas y que los agricultores no vean un euro de incremento en sus beneficios. Son los mayores perjudicados junto con los consumidores finales. El agricultor está recibiendo unos pagos que apenas cubren los costes de producción. Si el consumidor paga un 13% más que el año pasado, ¿quién gana este dinero? Se podría decir que todo se lo quedan los intermediarios.

Para combatir la situación, cada vez más establecimientos prefieren tratar directamente con el productor. Esto es, comprarlo en origen y negociar los precios de forma más directa. Puede ser la solución para que el mercado de la fruta sea más justo con los productores. Y así los consumidores no tendremos que pagar los sobrecostes de la fruta, imprescindible para una buena alimentación sana y equilibrada.

Laotracaradelamoneda

IDNet Noticias