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Martin Shkreli: el hombre más odiado tras subir un 5000% el precio de un medicamento contra el SIDA

Martin Shkreli

Martin Shkreli es, sin duda, el hombre más odiado del momento. Y parece que ha hecho mucho por merecerlo. Este empresario norteamericano ha decidido él solo subir el precio de un medicamento para tratar el SIDA un 5000%: la pastilla de Daraprim ha pasado de costar 13,5 dólares (12 euros) a costar 750 dólares (670 euros).

El Daraprim es un medicamento eficaz en el tratamiento de toxoplasmosis, una infección parasitaria que se contagia de animales a humanos, y de infecciones oculares y congénitas en personas que sufren el síndrome de la inmunodeficiencia adquirida. Hasta ahora, era una sustancia que tenía un precio asumible por sus consumidores, pacientes acostumbrados a pagar grandes cantidades de dinero por los antiretrovirales que mantienen a raya esta enfermedad.

Shkreli, de 32 años de edad y que hasta hace 4 años no sabía nada de farmacéuticas, es un gestor de fondos de inversión que el pasado mes de febrero fundó la empresa Turing, y a través de ella compró los derechos sobre el Daraprim en agosto, un medicamento con 60 años de historia que siempre ha sido económico. Y lo primero que ha hecho ha sido multiplicar su precio.

Esta decisión ha levantado las iras de Twitter, que se ha llenado de insultos hacia Shkreli, y no pocas amenazas de agresión. El emprendedor estadounidense se defiende asegurando en el New York Times que “Esta no es la típica decisión egoísta de una farmacéutica para fastidiar a los pacientes. Solo queremos mantenernos en el negocio”. Shkreli también defiende que el Daraprim es un medicamento poco usado y que tan solo hace falta consumirlo durante un año para que la toxoplasmosis desaparezca, por lo que el aumento de precio está justificado.

No es la primera vez que Martin Shkreli protagoniza una polémica. Hace cinco años intentó sin éxito que el organismo oficial de EEUU que da los permisos para que se comercialicen medicamentos y alimentos (FDA) impidiera que varios medicamentos no se pudieran a la venta. Se descubrió que Shkreli, mediante su fondo de inversión, estaba intentando apostar a la baja contra las acciones de las empresas farmacéuticas que tenían los derechos de dichos medicamentos. Con esa maniobra estaba intentando hundir sus nuevos productos para ganar dinero en bolsa hundiendo su cotización.

En 2011 fundó Retrphin, una firma de biotecnología que se dedica al tratamiento de enfermedades raras. Este año, el consejo de administración de la compañía decidió expulsar a Shkreli tras descubrir que su única intención era la de inflar el precio de las acciones de la compañía para conseguir beneficios en su fondo de inversión MSMB Capital Management. Retrphin pide una compensación de 65 millones de dólares por estas prácticas. 

Ante la catarata de insultos y amenazas que está sufriendo, Shkreli responde en Twitter con canciones de Eminem. Y en una entrevista concedida ala televisión CNBC asegura que no se arrepiente y que no va a bajar el precio del Daraprim.

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