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Lo que nos falta de verdad para dar carpetazo a la crisis, y no es poco

Jorge Chamizo – La economía española crece con fuerza y crea empleo ya desde hace varios trimestres. El actual ejercicio va mejor de lo previsto y el Gobierno prepara una nueva revisión al alza del crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB), que fijará por encima del 3%. De hecho, hemos alcanzado el nivel de renta previo a la profunda crisis que se inició en 2008. Sin embargo casi nadie dirá que estamos de nuevo en época de vacas gordas.

El ministro de Economía, Luis de Guindos, lo explica. A pesar de la recuperación de los niveles del PIB previos a la crisis, sigue sin alcanzarse el de empleo, un objetivo que el Gobierno espera lograr a finales de 2019 con 20 millones de ocupados. “No saldremos de la crisis definitivamente hasta que no creemos 1,5 millones de puestos de trabajo más“, apuntó el ministro

Esa sensación de crisis persistente puede resumirse en este dato: el peso de las rentas de trabajo en la riqueza nacional está dos puntos por debajo de las cifras de 2007. Algunos economistas y partidos políticos explican este dato revelador por el marcado descenso de los salarios en estos años. Pero el Gobierno replica que esa menor riqueza en manos de los asalariados se debe a ese menor nivel de empleo respecto a los máximos de 2007.

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El ministro de Economía español, Luis de Guindos. Foto de Efe
El ministro de Economía español, Luis de Guindos. Foto de Efe

Pero los datos son tozudos y contradicen la versión del Gobierno. Los salarios continúan sin despegar. Hasta el punto de que los costes laborales unitarios —el sueldo en relación a la productividad— continúan en negativo.

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En concreto, según explica El Confidencial, en el segundo trimestre del año, la remuneración nominal por asalariado (con inflación) se redujo el 0,1% en términos anuales, lo que, unido al aumento de 0,3% del deflactor implícito del PIB –el coste de la vida-, dio lugar a una caída de la remuneración por asalariado en términos reales del -0,3%. Como consecuencia de ello, los costes laborales caen un 0,7% anual “a pesar de la atonía de la productividad”, como sostiene BBVA Research

Desde el punto de vista de la psicología social, la mejora de la situación económica no se percibe en gran parte de la sociedad, sobre todo en las clases más desfavorecidas. Un reciente informe de la firma de estudios sociológicos Gallup, denominado No Recovery Yet for Spain’s Poor (‘Aún no hay recuperación para el segmento más pobre de España’), sostiene que, independientemente de lo que se pueda estar creciendo en España, hay desconfianza. La bofetada de la crisis fue enorme trass sucederse muchos años de crecimiento. Ahora los españoles dudan de los signos de bonanza. La herida sigue abierta.

IDNet Noticias

@Jorcha