Unas lentillas inteligentes podrían convertir las lágrimas humanas en algo más
A pesar de las notables mejoras que se han alcanzado en el diagnóstico y tratamiento del cáncer estamos muy lejos de haber vencido a esta enfermedad, que sigue matando anualmente a millones de personas. Y no es por falta de investigación: en todo el mundo hay hordas de científicos estudiando diferentes aspectos del cáncer para abordarlo desde múltiples perspectivas, algunas tan originales como la que acaba de presentar un equipo de científicos que pretende facilitar el diagnóstico con un dispositivo tan sencillo como unas lentillas.
El estudio ha sido realizado por científicos del Instituto Terasaki para la Innovación Biomédica, una organización sin fines de lucro con sede en California. La idea es fabricar unas lentillas capaces de analizar las lágrimas del usuario y detectar marcadores tumorales.
En concreto, estas lentillas estarían diseñadas para detectar exosomas, que son unas diminutas estructuras que las células cancerosas liberan a la sangre y que se cree que tienen un papel en el mantenimiento y la diseminación del cáncer. Las lentes irían impregnadas con unos anticuerpos especiales al que se unirían los exosomas, produciendo una reacción por la cual las lentillas se volverían rojas, avisando al usuario de que acuda al médico.
El proyecto aún está en una fase muy preliminar, pero de prosperar podría convertirse en una herramienta de detección fácil, rápida y menos costosa que otros procedimientos como la biopsia o la tomografía computarizada.
Es precisamente esta línea una de las que más relevancia está cobrando últimamente: el diseño de accesorios portátiles o wearables encaminados a la monitorización de la salud del usuario. Los smarwatchs y pulseras que cuentan los pasos y las pulsaciones ya están a la orden del día y hay proyectos más ambiciosos en curso, como por ejemplo el desarrollo de parches que generan electricidad a partir del sudor humano, los cuales podrían utilizarse para alimentar pequeños dispositivos que midan la respiración, el nivel de glucosa en sangre o cualquier otro parámetro.
No menos sorprendente es la camiseta que detecta infartos, una prenda inventada por una joven estudiante española que monitoriza en todo momento el ritmo cardiaco y envía una señal cuando detecta una anomalía.
El desarrollo de gadgets empezó a despuntar en el mercado con un enfoque lúdico -música, fotografías- o laboral -agendas, calendarios-, pero cada vez se están explorando más aplicaciones de utilidad para la salud y el bienestar de los usuarios. ¿Acabaremos dando más valor al uso relacionado con la salud que al uso original?
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