La farmacéutica Teva recortará un cuarto su plantilla y suspenderá el dividendo
Por Tova Cohen y Ari Rabinovitch
TEL AVIV (Reuters) - Teva Pharmaceutical Industries va a recortar su plantilla en más de un cuarto, abandonará muchas de sus plantas de producción y suspenderá el dividendo para las acciones ordinarias en una reestructuración ampliamente anticipada para ayudar a pagar su deuda.
La empresa con sede en Israel, que es la mayor fabricante de genéricos del mundo, dijo el jueves que su actuación supone una reducción de 14.000 empleos en todo el mundo, la mayoría de ellos en 2018.
El plan de reestructuración de dos años busca reducir la base de costes de Teva en 3.000 millones de dólares para finales de 2019, ante una base de costes estimada en 16.100 millones de dólares para 2017.
Las acciones de Teva subían un 14,6 por ciento a 18 dólares en Nueva York, pero han caído un 53 por ciento desde enero.
A los inversores les gustará este plan porque la mayoría está centrada en reducción de costes a corto plazo, dijo el analista de Wells Fargo David Maris.
Lastrada con casi 35.000 millones de dólares de deuda desde que adquirió el negocio de genéricos de Allergan Actavis por 40.500 millones de dólares, Teva ha realizado una serie de cambios desde que Kare Schultz fue nombrado consejero delegado el 1 de noviembre.
Teva espera una carga por la reestructuración en 2018 de al menos 700 millones de dólares, principalmente en el segundo y tercer trimestre y por costes de despidos.
Los inversores han cuestionado cómo podrá Teva pagar su deuda en los próximos años.
En una conferencia con analistas, Schultz dijo que Teva emplearía el flujo de caja para reducir la deuda, centrándose inicialmente en la deuda bancaria.
"No tenemos planes de ampliar capital, a corto ni a largo plazo", dijo a Reuters en una entrevista.