Yahoo Finanzas España 2019: mismo salario que hace 20 años pero precios mucho más altos
El Banco de España ha realizado un informe que compara la evolución de los salarios y del paro en España con los de la Unión Económica Monetaria Europea (UEM): los resultados no son nada positivos. Y es que, los españoles ganan exactamente lo mismo que en 1998.
En la UEM, el sueldo medio ha subido un 1,6% y el paro se ha mantenido más constante, variando entre el 8% y el 12,7% durante los últimos 20 años. Si bien España experimentó un gran crecimiento salarial entre 2003 y 2009, por encima del de la Unión Económica, la bajada salarial tras la crisis fue tal que se llegaron a obtener tasas negativas en el crecimiento nominal de los salarios y se alcanzaron datos de paro de más del 27%. Ahora, con una tasa de paro en torno al 15%, y tras dos décadas de subidas y bajadas de la tasa de crecimiento interanual de los salarios, los sueldos de los españoles se encuentran en la misma situación que hace 21 años. Es decir, el paro baja y los salarios vuelven al nivel de 1998. ¿Por qué la reducción de la tasa de paro no ha venido acompañada de un aumento de la tasa de crecimiento salarial? Los expertos apuntan como principales causas de la situación a la flexibilidad del mercado laboral y a los contratos a tiempo parcial no deseados.
La situación de precariedad actual resulta más preocupante si analizamos que, según un estudio de Eldiario.es basado en las variaciones del Índice de Precios de Consumo (IPC), el nivel de precios de los bienes y servicios de consumo en España ha aumentado, de media, más de un 15% en los últimos diez años. Esto no significa que todos los productos hayan aumentado su precio en un 15%. De hecho, el precio de los móviles ha disminuido más del 75%, pero sí lo han hecho muchos de ellos, de los cuales gran parte son productos de primera necesidad.
En una cesta de la compra en la que antes gastabas unos 100 euros, hoy gastarías unos 112 euros. Y es que pocos productos alimenticios son más baratos ahora que hace 10 años. Alimentos tan básicos como la fruta, un 34,2% más cara, los pescados, hasta un 18,1%, y las legumbres (+17,8%), han incrementado su precio. Lo mismo sucede con la carne, que ha incrementado su precio un 8,7%. De hecho, los únicos productos que han abaratado sus precios son los lácteos. Además, los precios no sólo se han disparado en los supermercados: la factura de servicios básicos como el agua, la luz, o el gas ha crecido hasta en un 50% desde 2008.
La conclusión: estamos peor
En otras palabras: ganamos lo mismo, pero pagamos más por los bienes y servicios. Esto significa que el nivel de vida y de consumo es mucho menor que años atrás. Y, además, si observamos la tendencia actual de trabajar cada vez más, en peores condiciones laborales y por un salario menor, el futuro no parece mucho más esperanzador.
Este tipo de problemas, junto a otros como la educación o el sistema de pensiones, son los que de verdad importan a la gran mayoría de los ciudadanos. Son los temas que deberían ocupar la agenda de todos y cada uno de los partidos políticos del país. Quizás ha llegado el momento de dejar las banderas de un color u otro de lado y comenzar a dar soluciones reales y efectivas a los problemas de la vida real. La que vivimos todos.
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