Yahoo Finanzas El presidente de una compañía turca reparte 25 millones de euros entre sus empleados
114 de los 370 miembros de la plantilla disfrutarán del bonus
Hay jefes buenos, jefes muy buenos, y luego está Nevzat Aydin. Este empresario turco, que vendió su compañía el pasado mes de mayo por 589 millones de dólares (unos 540 millones de euros), va a repartir 27 millones de dólares (casi 25 millones de euros) entre sus trabajadores.
De la plantilla de 370 trabajadores, el bonus de la venta le corresponde a 114. Cada uno de ellos recibirá 220.000 euros. Si el sueldo medio de la compañía es 1.500 euros, estos empleados ganarán de una sola vez el equivalente a lo que habrían ganado trabajando más de 12 años.
Yemeksepet, una empresa de reparto de comida a domicilio fundada hace 15 años y que tiene mucho éxito en Turquía, fue comprada por la alemana Delivery Hero. Nevzat Aydin asegura en declaraciones concedidas a CNN Money que su decisión se debe a que “el triunfo de Yemeksepet se debe al esfuerzo de su plantilla, que muchas noches ni siquiera ha posido descansar, debido a todo el trabajo”.
Según afirma Business Insider, Yemeksepeti, que significa 'carro de la compra' en turco, es la web más popular de reparto de comida a domicilio del país. A través de ella, sus clientes pueden encargar comida de Burger King o de Domino’s Pizza que luego es entregada por sus repartidores. Su éxito traspasa fronteras, ya que en los últimos años ha expandido su negocio a Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudí, El Líbano, Qatar, Omán y Jordania. Se estima que en toda sue red sirve más de 3 millones de comidas al mes.
“Es un bonus que nos cambia la vida”, explica un trabajador a CNN Money. “Muchos se pusieron a llorar cuando el presidente nos comunicó su plan de repartir el dinero”. Sobre la decisión de dar el bonus solo a 114 empleados y no a toda la plantilla, Nevzat Aydin explica que “solo se pueden beneficiar de la paga los empleados que lleven más de 2 años trabajando para nosotros. Me hubiera encantado hacer algo más por los demás, pero no pude”, responde de manera enigmática el jefe que todos habríamos querido tener.
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