Anuncio
Mercados españoles cerrados
  • IBEX 35

    11.074,60
    -36,70 (-0,33%)
     
  • Euro Stoxx 50

    5.083,42
    +1,68 (+0,03%)
     
  • Dólar/Euro

    1,0781
    -0,0013 (-0,12%)
     
  • Petróleo Brent

    87,45
    -0,03 (-0,03%)
     
  • Oro

    2.254,80
    +16,40 (+0,73%)
     
  • Bitcoin EUR

    65.241,31
    -6,94 (-0,01%)
     
  • CMC Crypto 200

    885,54
    0,00 (0,00%)
     
  • DAX

    18.492,49
    +15,40 (+0,08%)
     
  • FTSE 100

    7.952,62
    +20,64 (+0,26%)
     
  • S&P 500

    5.254,35
    +5,86 (+0,11%)
     
  • Dow Jones

    39.807,37
    +47,29 (+0,12%)
     
  • Nasdaq

    16.379,46
    -20,06 (-0,12%)
     
  • Petróleo WTI

    83,11
    -0,06 (-0,07%)
     
  • EUR/GBP

    0,8539
    -0,0008 (-0,09%)
     
  • Plata

    25,10
    +0,18 (+0,74%)
     
  • NIKKEI 225

    40.369,44
    +201,37 (+0,50%)
     

El lado oscuro del coche eléctrico

El lado oscuro del coche eléctrico

El desembarco del coche eléctrico se acerca. Los fabricantes afinan sus modelos y anuncian mejoras impresionantes de autonomía y prestaciones para el corto plazo que pueden dar un vuelco a la cuota de mercado de este tipo de coche, todavía escasa. Además, el calentamiento global, cada vez más palpable, puede elevar la presión para que la regulación sea cada vez más exigente con los motores de combustibles fósiles y, por tanto, más favorable a los eléctricos.

Es un cambio tecnológico radical, disruptivo y ha derivado también en un debate sobre si la irrupción del coche eléctrico generará más o menos puestos de trabajo. Por un lado este vehículo tiene menos componentes que el convencional, por tanto para su fabricación se requieren menos horas de trabajo. Pero, por otro, genera una serie de servicios de mantenimiento y unas nuevas infraestructuras que pueden suponer un revulsivo para algunas actividades.

Entre estas últimas encontramos: comercio y reparación, estación de servicio, control técnico, desmantelamiento, reciclaje, alquiler de coches y servicios relacionados con los nuevos usos de la movilidad, como el coche compartido. Actividades que, dada la necesaria proximidad del servicio, crearán empleos cualificados que resulta complicado deslocalizar.

[También de interés: Por qué Tesla va a destrozar la industria del automóvil]

En un informe de hace unos años realizado por El Observatorio Cetelem Europeo del Automóvil, el 62% de los europeos consideraba que la creación del sector eléctrico tendrá consecuencias positivas sobre el empleo.

ANUNCIO

Los portugueses, rusos y turcos eran los más optimistas. Pero la alegría va por barrios. Curiosamente algunos de los países con más industria del motor, como Alemania, Bélgica, Francia y Reino Unido, eran los más indecisos respecto a los beneficios del sector en términos de empleo. Su tradicional y poderosa industria se ve amenazada.

España, uno de los países que ha apostado industrialmente por este nuevo vehículo, adoptaba una posición intermedia. El 63% de los encuestados preveía un efecto positivo, el 27% se inclina por un efecto nulo y un 10% se declara dubitativo.

Los sindicatos tradicionales de la industria se muestran sin embargo preocupados con la irrupción de estos coches. Quizá lo están en general por el imparable aumento de la automatización en las cadenas de producción de los vehículos, sean del tipo que sean.

Por el contrario, la federación que agrupa a 50 ONG europeas que promueven la movilidad más limpia Transport & Environment (T&E) considera en un reciente informe citado por La Vanguardia que “al contrario de lo que muchos creen, este cambio no tiene que conducir a la destrucción de valor en la industria automovilística europea”. T&E además cita “las investigaciones de la Fundación Europea del Clima, que calculan que entre 500.000 y 1,1 millones de empleos adicionales netos podrían generarse para 2030 si los automóviles pasan de los motores actuales a los motores eléctricos”.

Es sin duda el laboral un factor muy importante en un mundo donde el trabajo no sobra, pero es aún más relevante luchar contra el cambio climático y la contaminación. Si la movilidad se canaliza con vehículos eléctricos o híbridos, nuestra calidad de vida y la de nuestros hijos dará un salto cualitativo sin precedentes. Apostemos por ello.

IDNet Noticias.

@Jorcha