Anuncio
Mercados españoles cerrados
  • S&P 500

    5.018,41
    -53,22 (-1,05%)
     
  • Nasdaq

    15.482,00
    -230,75 (-1,47%)
     
  • NIKKEI 225

    37.628,48
    -831,60 (-2,16%)
     
  • Dólar/Euro

    1,0722
    +0,0021 (+0,19%)
     
  • Petróleo Brent

    87,88
    -0,14 (-0,16%)
     
  • Bitcoin EUR

    59.774,46
    -639,30 (-1,06%)
     
  • CMC Crypto 200

    1.385,99
    +3,42 (+0,25%)
     
  • Oro

    2.342,20
    +3,80 (+0,16%)
     
  • HANG SENG

    17.284,54
    +83,27 (+0,48%)
     
  • Petróleo WTI

    82,50
    -0,31 (-0,37%)
     
  • EUR/GBP

    0,8580
    -0,0003 (-0,03%)
     
  • Plata

    27,33
    -0,02 (-0,08%)
     
  • IBEX 35

    10.983,70
    -44,10 (-0,40%)
     
  • FTSE 100

    8.078,86
    +38,48 (+0,48%)
     

Buffett muestra que ahora todos somos inversores en tecnología

(Reuters) - La participación de Warren Buffett en Apple no sólo muestra cómo han cambiado el inversor y la fabricante del iPhone, sino también cómo ha cambiando el mundo.

Apple se ha convertido en algo que se parece curiosamente a una acción "valor" ("value stock" en inglés, empresas que se considera que están cotizando a un valor inferior al valor real de sus activos) y Buffet se está aventurando en un área, la tecnológica, que en el pasado dijo no entender.

Es más, la tecnología se ha convertido en más que un simple sector empresarial. Ya no se puede ser inversor y evitar la tecnología, independiente de cómo se defina, de la misma manera que no es posible ser una forma de vida sin estar basada en el carbono.

Berkshire Hathaway, vehículo de Buffett, reveló el lunes una participación de más de 1.000 millones de dólares en Apple, una posición que según dijo al Wall Street Journal fue tomada por uno de sus dos gestores de inversión.

ANUNCIO

Buffett también estudia apoyar a un grupo que incluye al fundador de Quicken Loans Inc, Dan Gilbert, para la compra de los activos de internet de Yahoo, según dijeron fuentes a Reuters.

Esto viene de un hombre que durante el auge de las puntocom a finales de 1990 explicó elocuentemente por qué él y su socio Charlie Munger se mantuvieron alejados de la tecnología:

"Nuestro problema, y es algo que no podemos resolver estudiándolo, es que no sabemos qué empresas del sector tecnológico poseen una ventaja competitiva verdaderamente duradera", escribió Buffett en 1999.

"Si tenemos una fortaleza, es la de reconocer cuándo estamos operando bien dentro de nuestro círculo de competencia y cuándo nos estamos aproximando al perímetro. Predecir la rentabilidad a largo plazo de las empresas que operan en sectores que cambian rápidamente se encuentra simplemente mucho más allá de nuestro perímetro".

Ese argumento se reduce a dos puntos: Buffett no puede llegar a entender qué empresas tecnológicas tienen un "foso" defensivo a su alrededor ni cómo cambia la tecnología para minar esas ventajas.

La marca premium de Apple podría ser esa suerte de foso profundo, pero siempre se puede argumentar que el ritmo en el cambio tecnológico se ha acelerado desde 1999. La cuestión ahora no es qué empresa online de entrega de mascotas va a ser la que se imponga a las demás (sabemos que probablemente será Amazon), si no qué empresa podría tener un negocio aislado del impacto de la tecnología y la digitalización. Hay muy pocas si es que hay alguna que cumplan esa definición.

¿ACCIÓN "VALOR"?

A medida que el impacto de la tecnología en los negocios se vuelve más generalizado, la estrategia de sentarse a esperar para ver quiénes son al final los ganadores conlleva ahora más riesgo que nunca en el pasado.

Basta con estudiar el impacto de los coches autónomos en el sector seguros, al que Buffett tiene una gran exposición a través de GEICO, para comprobar que el cambio tecnológico no puede evitarse. O para el caso, se puede analizar IBM, hasta ahora la más notable incursión de Buffett en la tecnología, y una apuesta perdedora hasta la fecha.

Y también está el hecho de que ahora Apple se parece mucho más a las empresas de valor de las que Buffett ha hecho tradicionalmente su especialidad. Apple cotiza con un PER de unas diez veces, aproximadamente la mitad de la media del mercado. Apple también está retribuyendo al accionista. Y Apple es una máquina de efectivo que genera enormes unos flujos de caja que, a su manera, no difieren mucho de otros sectores tradicionalmente favoritos para Buffett.

Estas son características de una empresa más madura.

Las acciones de tecnologías de la información, como sector, componen ahora una mayor parte del mercado, representando casi el 20 por ciento del índice S&P 500. Esto supone una subida de alrededor de un tercio desde 2008 y dos veces y media más que en 1989. Evita las acciones tecnológicas y verás limitadas tus opciones de forma considerable. Esto preocupa en particular a un inversor como Buffett, cuyo vehículo Berkshire Hathaway tiene activos por un total aproximado de 550.000 millones de dólares. Hay muy pocas empresas que Buffett pueda comprar en un volumen que sea significativo para su rentabilidad sin impulsar el precio al alza y por lo tanto aumentar el coste de su incremento de participación.

El mismo hecho de que Buffett haya delegado participaciones menores a dos lugartenientes, Todd Combs y Ted Weschler, también puede ser un reconocimiento de las dificultades de la gestión de activos en su escala.

Por el momento, la incursión de Buffett en la tecnología va bien esta vez. Apple, que había bajado alrededor de un 30 por ciento en el último año, subió un 3,71 por ciento el lunes después de la noticia.

Sin embargo, el perfil de riesgo esencial de la tecnología, o su capacidad para transmitir ondas de riesgo a otros sectores, es la historia de fondo. Sus productos son geniales, pero como pueden dar fe los accionistas de Blackberry, la competencia y los cambios pueden serbrutales.

Si ahora todos somos inversores en tecnología, todos estaremos sujetos a esos riesgos.

(James Saft es un columnista de Reuters. Las opiniones expresadas son suyas; en el momento de la publicación, James Saft no tenía inversiones directas en los valores mencionados en este artículo. Podría ser titular indirecto como inversor en un fondo. Más columnas del autor en http://blogs.reuters.com/james-saft)