El éxito no te dará la felicidad… pero sí podría quitártela
Si crees que el éxito es el vehículo para lograr la felicidad, te tenemos dos noticias. La primera: no eres el único que piensa esto; de hecho, es una creencia muy arraigada socialmente que se nos inculca desde la infancia. La segunda: la evidencia muestra que esta relación no funciona así, y que, de hecho, las personas tradicionalmente exitosas son propensas a cometer errores que los alejan de la felicidad.
“La felicidad incrementa el éxito, pero si no eres cuidadoso, el éxito puede disminuir la felicidad”, dijo Raj Raghunathan, profesor de McCombs School of Business de la Universidad de Texas Austin, en el marco de Wellbeing 360.
Raghunathan detalló que es habitual que las personas que se ciñen a la concepción tradicional de éxito caigan en actitudes que dañan su bienestar. También ofreció alternativas para evitarlo.
3 errores que te roban la felicidad aunque tengas éxito
1. Buscas tener el control
Entre más responsabilidades tiene una persona en el día a día, su necesidad de control crece. Por ejemplo, en el entorno laboral hay líderes que pueden incurrir en actitudes de microgerencia… y, aunque al principio podría parecer que tener el control es una forma de evitar sobresaltos y ser más feliz, el resultado es totalmente opuesto.
El primer motivo es que a otras personas no les gusta que las controles; el segundo, que la vida tiene altos niveles de incertidumbre que no se pueden controlar, dijo Raghunathan.
¿Cómo evitar este error?
Ten en claro que no puedes controlar todo. Si basas tu felicidad en lo que quieres que pase, es muy probable que termines frustrado.
2. Buscas sentirte superior
Para explicar esto, es necesario compartirte una verdad incómoda: si tienes una posición alta dentro de tu empresa o de tu círculo, muchas personas van a reírse de tus chistes aunque no sean graciosos y mentirán para agradarte.
Raghunathan explicó que este fenómeno, en el que las personas encuentran más simpático lo que diga o haga alguien de jerarquía mayor, tiene una alta prevalencia en las organizaciones. Un estudio en el que una broma no particularmente graciosa, pero tampoco desagradable fue compartida a dos grupos; en el primero, dijeron que el CEO la había hecho, mientras que en el segundo, se la atribuyeron a alguien de baja jerarquía. Los resultados mostraron que el primer grupo consideró la broma más graciosa que el segundo.
“Si eres la persona más alta en rango, estás recibiendo mucho feedback de que tienes características positivas”, explicó.
Dejarte llevar por estos comentarios y opiniones de terceros, naturalmente te lleva a pensar que tienes más atributos positivos que los demás “y te lleva a buscar la superioridad”. Así, eres más propenso a permitir que tu estado de ánimo dependa de factores externos y que tus emociones sean una montaña rusa, comentó.
¿Cómo evitar este error?
Es necesario que encuentres tu flujo y que te permitas navegar las situaciones con calma y naturalidad. Solo necesitas medirte contra ti mismo en el pasado, recordó.
3. Quitas prioridad a tus relaciones
Raghunathan explicó que, entre más dinero tienen las personas, les resulta más fácil aislarse. Por ello, no es común que generen nuevas amistades. Su contexto hace que vayan restando importancia a sus relaciones interpersonales. Esto, a largo plazo, los hace sentir solos.
¿Cómo evitar este error?
Volver a priorizar relaciones con amigos o familia y establecer nuevas oportunidades para conocer personas.