Yahoo Finanzas El hombre que perdió su memoria en un accidente y ahora la ha recuperado gracias a Twitter
Thomas Dixon sufrió un terrible accidente que dañó su cerebro. Desde que un coche le atropelló cuando corría cerca de casa de sus padres, su memoria no ha vuelto a ser la misma. Cuando se despertó en el hospital, apenas recordaba nada de lo que le había pasado. Ni del accidente, ni antes del suceso: había perdido la memoria episódica.
Thomas, que tiene un coeficiente intelectual muy superior a la media, que incluso le ha permitido formar parte de Mensa, la asociación norteamericana de superdotados, tuvo que empezar una nueva vida. Se levantaba, salía a la calle y desayunaba en una cafetería. Más tarde iba al gimnasio. Allí, haciendo ejercicio no recordaba qué había comido esa misma mañana. Sabía cómo hacer las cosas, pero no cómo recordarlas.
Así que inventó un método fantástico para que su día a día se viera lo menos afectado: se dedicó a escribir en Twitter todo lo que hacía, y utilizó su timeline como una especie de memoria auxiliar. Podía escribir en su móvil qué tipo de café había pedido, qué ejercicio había hecho en el gimnasio, el nombre de una canción que le había gustado, hasta lo que hablaba con cualquiera que se cruzara en su camino. Incluso detalles de su vida sexual, que por cierto, escribe en coreano, para evitar momentos embarazosos por si alguien mira lo que está escribiendo en el móvil.
Su cuenta en la red de microblogging alcanza los 22.000 tuits y es privada. Si pudiéramos tener acceso a ella, literalmente estaríamos leyendo sus pensamientos, como si fuera el Ulises de James Joyce. Como asegura el propio Dixon en declaraciones a la web Fast Colabs “Tengo a la vez peor y mejor memoria que cualquier persona que me encuentro por la calle”.
Busca patrones en su día a día
Este truco le ha permitido seguir con su vida normal e incluso mejorarla: cada día, cuando llega a casa, descarga todos los tuits que ha escrito y lo pasa a una hoja de Excel, para así poder buscar patrones. Por ejemplo, ver qué es lo que más le ha gustado, para repetirlo. O que es lo que más le ha desagradado, para evitarlo.
También toma decisiones con estos datos. Por ejemplo, si descubre que la semana anterior ha ido muchas veces al gimnasio, no saldrá a correr si tiene una hora libre. O por ejemplo, verá si se está pasando al tomar tanto café.
Thomas Dixon no solo utiliza Twitter para ayudarse. También se apoya en su cuenta de correo electrónico y en el calendario de su teléfono. En ellos escribe las interacciones sociales que ha mantenido y también su agenda de compromisos.
Quiere patentar su idea
Dixon está tan satisfecho con su método que incluso está pensando en crear una aplicación para móviles que pueda ayudar a otras personas que estén atravesando el mismo problema que él. También cree que puede ser un buen sistema para ancianos que tengan pérdidas de memoria.
Cómo afirma “Tengo muchas ganas de saber lo que ha pasado en mi vida, porque eso es lo que la lesión me robó. El contexto, la capacidad para realizar un seguimiento de los eventos que conforman mi día a día. Pero con todo lo que estoy haciendo ahora, siento que mi vida no se pierde. Este sistema me ayuda a sentir que mi vida no se ha olvidado”. Esperemos que otras personas se puedan beneficiar también de su sistema.
