Dstrux, el correo electrónico que se autodestruye a los cinco segundos

Los adolescentes de hoy en día viven para Snapchat. Esta aplicación para móviles permite enviar fotografías que se autodestruyen a los segundos de haberlas recibido. Ven este sistema la mejor forma de enviarse secretitos y pasar un buen rato.

Pero Snapchat tiene dos graves inconvenientes: cualquiera puede hacer una captura de pantalla –y por lo tanto guardar una copia de la imagen- y dos, que las fotos realmente no desaparecen: las autoridades de Estados Unidos han descubierto que los servidores de Snapchat guardan todos los datos enviados por sus usuarios.

Estos dos problemas parecen no estar presentes en Dstrux, un software que hace lo mismo que Snapchat, pero en el correo electrónico y en Facebook. Sí, con este programilla podemos enviar lo que se nos pase por la cabeza a nuestro jefe, y solo habrá un rastro: lo que haya quedado marcado en su retina, nada más.

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Para usar Dstrux, tendremos que subir a sus servidores la imagen o el menaje que queramos enviar y la dirección de correo del destinatario. Éste recibirá un mail o un mensaje privado en Facebook con un enlace que le llevará a una página en la que se verá la imagen enviada por nosotros, pero fuertemente distorsionada.

La web solo dará acceso a la imagen definitiva si el destinatario pulsa la barra espaciadora. Si intenta hacer una captura de pantalla, no podrá hacerlo, ya que la página no permite esa combinación de teclas. Tampoco podrá pulsar con el botón derecho del ratón y pedir guardar la imagen en su disco duro.

Pulsando la barra, tendrá acceso a la imagen durante unos cinco segundos, y luego desaparecerá para siempre. Lo único que podemos hacer para recordarla es hacer una foto a la pantalla, algo que los diseñadores de Dstrux no pueden evitar.

Los creadores de este sistema aseguran que su idea no es la de inventar un gigantesco sistema de envío de fotos subidas de tono –un uso que muchos hacen de Snapchat- si no el de inventar un sistema seguro para que las empresas puedan compartir entre sus trabajadores material sensible y secreto sin miedo a dejar rastro. Es más, Dstrux está trabajando en una versión que envíe los datos fuertemente cifrados para que nadie intercepte la información enviada.