Anuncio
Mercados españoles cerrados
  • IBEX 35

    10.729,50
    -35,50 (-0,33%)
     
  • Euro Stoxx 50

    4.918,09
    -18,48 (-0,37%)
     
  • Dólar/Euro

    1,0661
    +0,0015 (+0,14%)
     
  • Petróleo Brent

    87,20
    +0,09 (+0,10%)
     
  • Oro

    2.406,70
    +8,70 (+0,36%)
     
  • Bitcoin EUR

    59.961,48
    +1.504,82 (+2,57%)
     
  • CMC Crypto 200

    1.371,97
    +59,34 (+4,52%)
     
  • DAX

    17.737,36
    -100,04 (-0,56%)
     
  • FTSE 100

    7.895,85
    +18,80 (+0,24%)
     
  • S&P 500

    4.967,23
    -43,89 (-0,88%)
     
  • Dow Jones

    37.986,40
    +211,02 (+0,56%)
     
  • Nasdaq

    15.282,01
    -319,49 (-2,05%)
     
  • Petróleo WTI

    83,24
    +0,51 (+0,62%)
     
  • EUR/GBP

    0,8612
    +0,0056 (+0,65%)
     
  • Plata

    28,75
    +0,37 (+1,29%)
     
  • NIKKEI 225

    37.068,35
    -1.011,35 (-2,66%)
     

Por qué el dichoso síndrome postvacacional es un clásico muy latino

No falla a su cita. Todos los finales de agosto y comienzos de septiembre lo tenemos aquí, es el llamado síndrome postvacacional, la depre de volver a currar, la vuelta al cole de los mayores.

En España lo sufrirá este año el 33% de los trabajadores. según datos de Lee Hecht Harrison, una división de Adecco. Además, parte importante de los dos tercios restantes padecerá un cuadro de fatiga o estrés directamente vinculado a ese cambio entre las vacaciones y la vuelta a la vida laboral.

¿Pero es esto condición humana mundial o planetaria o algo nuestro? Pues es más bien un fenómeno de países latinos o meridionales porque tienden a concentrar las vacaciones en un periodo de asueto estival muy largo, con una duración media de 15 días, que en muchos casos llega al mes, que nos rompe por completo el ritmo. Si fueran más cortas, no provocaría unos efectos traumáticos tan pronunciados.

El síndrome provoca falta de energía, de motivación o tristeza y nace de una ruptura en el proceso de adaptación o transición entre el tiempo de ocio y descanso y la vuelta a la rutina de trabajo. El síndrome también puede manifestarse mediante trastorno del sueño, nerviosismo, estrés. En los casos más extremos, el trabajador afectado puede experimentar ansiedad, dolor de cabeza y malestar general, palpitaciones, taquicardia, molestias digestivas y dolores musculares o de cabeza.

image

En otros países, la tradición o la cultura predominante tiende a repartir los periodos de vacaciones a lo largo del año de forma más homogénea, lo que ayuda a que el cambio de tipo de vida no sea tan drástico. A ello contribuye claro está que el calendario escolar de los hijos está también más repartido a lo largo del curso, de tal modo que suelen tener cinco periodos de vacaciones, cuatro de ellos, de una semana de duración. Ocurre en los países anglosajones y del Norte de Europa. Por ejemplo, en Reino Unidor, Irlanda, Alemania, Dinarmarca, etc. Aquí tenemos básicamente tres recesos, uno extremadamente largo. También influye en este tema os hábitos culturales, las costumbres y los rigores del calor en las zonas meridionales.

ANUNCIO

Los expertos recomiendan ciertos trucos, algunos que implican algún que otro sacrificio. Por ejemplo, se recomienda adelantarse para prevenirlo y hacer que la transición de las vacaciones al trabajo sea lo más suave posible. Algunas medidas en esta línea son levantarse pronto unos días antes de reincorporarse al trabajo para acostumbrarse con antelación a los horarios habituales, volver del lugar de vacaciones unos días antes, repartir los días de vacaciones a lo largo del verano, tener una actitud positiva hacia el trabajo y marcarse objetivos ilusionantes en el ámbito profesional y personal.

Por otra parte, en España es un fenómeno que afecta principalmente a mujeres por la mayor presión que soportan en el entorno familiar y laboral, según alerta la Asociación de Enfermería Familiar y Comunitaria de Catalunya (AIFCC).

IDNet Noticias

@Jorcha