Yahoo Finanzas Las empresas de autobuses declaran la guerra al AVE
El auge del AVE es patente, pero no se ve con la misma complacencia en todos los sectores. Los empresarios de autobuses han denunciado a Renfe ante la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC) por considerar que está ofreciendo precios por debajo de coste, al aplicar subvenciones cruzadas entre servicios de AVE y larga distancia y los sometidos a servicio público, lo que consideran “un abuso".
La denuncia de la Confederación Española de Transporte en Autobús (Confebus) acusa a Renfe de un presunto abuso de posición de dominio en el transporte de pasajeros por regalar billetes de transporte en Cercanías a los usuarios de AVE y larga distancia. Y concreta que la operadora ferroviaria está aplicando precios inferiores a los costes reales, “provocando la exclusión de otros operadores del mercado o perjudicándoles gravemente”.
En efecto, los viajeros que utilizan el AVE tienen la posibilidad de viajar hasta su estación de referencia con billetes que Renfe les da totalmente gratis al comprar el de AVE o larga distancia. Según la organización patronal de las empresas de autobuses, estas conductas “pueden suponer un grave daño a la competencia y poner en riesgo miles de empleos, así como el bienestar de consumidores y usuarios”.
Las empresas de transporte público en autobús dan empleo directo a 88.000 personas y facturan 3.700 millones al año. A su entender, la agresiva política comercial de Renfe desde principios de 2013 está perjudicando a su negocio y se refleja en el importante descenso del número de pasajeros del autobús (1,4 millones menos en 2013) mientras que la operadora ferroviaria ha ganado 3,25 millones de usuarios.
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Las críticas se extienden al propio Ministerio de Fomento, precisamente coincidiendo con la inauguración de la nueva línea de AVE hasta León. Las empresas de autobuses acusan al Ministerio de “querer llenar los trenes a cualquier precio”, cuando hasta ahora la alta velocidad y el transporte en autobús han convivido bien porque estaba “muy bien definido” el mercado de cada uno.
Coincidiendo con la apertura del nuevo tramo a León, Renfe ha sacado promociones de entre 5 y 20 euros para viajar entre esta capital, Palencia, Valladolid y Madrid hasta mediados de octubre y Alsa ha respondido rebajando un 50% el precio de todos sus trayectos de Madrid a Valladolid, León, Gijón, Oviedo y Palencia hasta finales de mes, con algunos viajes también a cinco euros.
La agresividad comercial de Renfe coincide en el tiempo con la apertura del sector a la competencia, donde la aplicación de precios bajos y billetes gratis probablemente desincentivará la entrada de nuevos operadores. A eso hay que añadir Renfe se beneficia de que Adif paga la infraestructura ferroviaria pero no le repercute totalmente el coste.
En sus reivindicaciones, las empresas de autobuses han entrado quizá en terreno resbaladizo, al plantear que debería haberse planteado si hay suficiente demanda, antes de construir las líneas de alta velocidad.
Si la construcción de redes de AVE hay que supeditarla a la demanda, cultivaremos la España de las dos (o más) velocidades y las regiones deprimidas estarán cada vez más abandonadas. No deja de llamar la atención que sea un sector subvencionado el que hace estas reivindicaciones.
Es importante liberalizar la economía y que las empresas sean rentables, pero también que busquemos la solidaridad y la igualdad de oportunidades para todos los españoles, vivan donde vivan.
IDNet Noticias
@maribelrodrigo
