Yahoo Finanzas Y la banca culpa ahora de la burbuja inmobiliaria a… Aznar
Las causas de la enorme burbuja inmobiliaria que sufrió España y cuyas letales consecuencias se siguen y se seguirán pagando por todos (bueno, por unos más que por otros) durante muchos años son diversas. Los culpables también. Se ha acusado de ello al Banco de España, a los distintos gobiernos, a la propia banca, a los partidos políticos por gestionar las cajas de ahorro como si fueran un cortijo caracterizado por el enriquicimiento fácil, el despilfarro y el nepotismo, al euro y al BCE porque propició la posibilidad de disponer de dinero muy barato por primera vez en la historia de España, a los alemanes y al resto de países con ahorro suficiente como para prestárselo en cantidades ingentes a los nuevos ricos del Sur, y a los ciudadanos, por emborracharse de deuda sin medir las consecuencias a largo plazo.
Ahora, sin embargo, surge una voz cualificada, nada más y nada menos que la del presidente de la patronal bancaria, que acusa directamente con su experimentado dedo al expresidente del Gobierno, José María Aznar, y al Gobierno que dirigía.
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El presidente de la Asociación Española de Banca (AEB), Miguel Martín, declaraba ayer ante una selecta comisión de diputados que fue el Gobierno del político conservador el que básicamente abrió la caja de Pandora durante su segunda legislatura, en la que tenía mayoría absoluta. ¿Cómo? Con una norma que facilitó y abarató el cambio de las hipotecas que estaban a altos tipos de interés fijos por los variables, que bajaron con fuerza tras la llegada del euro.
Sorprendentes declaraciones cuando menos las del jefe de los banqueros, porque la medición del riesgo de cada préstamo, sea cual sea el tipo de interés de referencia elegido, corresponde a los propios bancos, que viven, han vivido y vivirán precisamente de la evaluación de esas amenazas de impago al mover el dinero de los depositantes.
Las declaraciones de Martín, desveladas por El País, se produjeron ayer en una comisión del Congreso de los Diputados sobre la transparencia en productos bancarios, que se celebró a puerta cerrada. El presidente de los banqueros recibió enseguida la réplica de Vicente Martínez Pujalte, portavoz del PP, que intervino para reprochar su análisis y recordar que Martín era subgobernador del Banco de España cuando se tomó la medida.
Tampoco se entiende muy bien que Martín dijera que cinco millones de accionistas de bancos "no son culpables de la crisis" y que "han perdido 60.000 millones de valor en Bolsa". Primero, porque son, como cualquier otro accionista, responsables de lo bien o mal que vaya la empresa en la que participan en la proporción en que son propietarios. Para eso son los dueños, y ser dueño de un negocio tiene esos riesgos. Segundo, porque todos los bancos siguen repartiendo dividendos y el valor de las acciones ha caído, pero poco más de lo que han caído las de otros sectores. Y el que no ha vendido sus títulos no ha perdido nada. Tiene una minusvalía en potencia.
Hubiera afinado más el responsable de los banqueros si hubiera apuntado a varios amigos y excompañeros de partido de Aznar, cuya gestión durante el boom y el crash posterior al frente de algunas cajas pasarán a la historia como ejemplo de lo que no se debe hacer.
