Anuncio
Mercados españoles cerrados
  • S&P 500

    5.048,42
    -23,21 (-0,46%)
     
  • Nasdaq

    15.611,76
    -100,99 (-0,64%)
     
  • NIKKEI 225

    37.628,48
    -831,60 (-2,16%)
     
  • Dólar/Euro

    1,0733
    +0,0032 (+0,30%)
     
  • Petróleo Brent

    89,23
    +1,21 (+1,37%)
     
  • Bitcoin EUR

    60.506,32
    +791,25 (+1,33%)
     
  • CMC Crypto 200

    1.398,50
    +15,93 (+1,15%)
     
  • Oro

    2.344,60
    +6,20 (+0,27%)
     
  • HANG SENG

    17.284,54
    +83,27 (+0,48%)
     
  • Petróleo WTI

    83,77
    +0,96 (+1,16%)
     
  • EUR/GBP

    0,8573
    -0,0010 (-0,12%)
     
  • Plata

    27,47
    +0,12 (+0,44%)
     
  • IBEX 35

    10.983,70
    -44,10 (-0,40%)
     
  • FTSE 100

    8.078,86
    +38,48 (+0,48%)
     

El porqué de la imparable decadencia de Brasil

Brasil, es la octava economía del mundo, en términos de PIB, beneficiada en gran medida en los últimos años de los altos precios de las materias primas. Es uno de los principales exportadores de este tipo de productos y a lomos de ese caballo llegó a crecer el 7,5% en 2010. Pero inició su declive poco después para entrar en recesión a partir del 2014, hasta llegar a una caída del 3.8% de su PIB en 2015, lo que implica la mayor recesión económica del país en el último cuarto de siglo.

Pero además, los problemas se le acumulan al país: inflación galopante, déficit creciente, elevado desempleo, escasa inversión y un estallido de corrupción que provoca un círculo vicioso de difícil solución.

Los economistas sostienen que, más allá de la crisis de China y el desplome de los precios de las materias primas que afecta a la región en general, hay factores estructurales que explican la fuerte caída del PIB brasileño.

Su modelo de crecimiento se basó en gran medida en un aumento del consumo de las familias a base de estímulos coyunturales, como la subida del salario mínimo, las ayudas y las deducciones fiscales, que ahora no se pueden mantener.

ANUNCIO

Algunos piensan que la madre del cordero en esta crisis de país es la política. La corrupción mina los cimientos del Gobierno y los partidos y en paralelo se vive un pulso intenso entre el gobierno y el Congreso. Se trata del famoso Impeachment, que no es más que un juicio político, desarrollado por la cámara baja y alta de las cortes brasileñas. Los cargos son varios, desde soborno y desviación de capitales públicos a través de la petrolera Petrobras, a manipulación y distorsión de las cuentas públicas estatales. Este no es el mejor escenario político-económico para desarrollar unos juegos olímpicos este verano.

El ejecutivo no tiene apoyos para sacar adelante un plan d choque que rompa ese círculo vicioso. Todo ello ha provocado un deterioro de la confianza de los mercados en su economía. Como resultado las principales calificadoras internacionales de riesgo han retirado el grado de inversión a la deuda del país. El investment grade es el sello de buen pagador que le habían otorgado en la década pasada.

[También de interes:Por qué le interesa a un país devaluar la moneda y qué efectos tiene, explicado fácilmente]

image

Klaus with K

A medida que el gobierno de Rousseff pierde recaudación por impuestos y pide dinero prestado a intereses mayores para combatir la inflación, la deuda pública bruta de Brasil aumenta en relación al PIB: llegó a 66% en 2015 y se proyecta que este año seguirá creciendo.

Por todo esto suben los tipos de interés a los que se financian el Estado y las empresas y cae la inversión privada. También la pública porque no hay dinero, sobre todo tras los excesos derivados del Mundial de Futbol de 2014 y la asunción de los costes de las obras de los Juegos Olímpicos que acoge este verano.

Los datos oficiales muestran diez trimestres seguidos de caída de las inversiones en Brasil, que sólo en los últimos tres meses de 2015 tuvieron un retroceso de 4,9% respecto al trimestre anterior.

Brasil es uno de los motores de América y del mundo, y su estabilidad y prosperidad es clave por tanto para todos. ¿Qué pasará con Brasil? Es difícil saberlo, pero es posible que tras unos años de apretarse el cinturón, salga de esta, reforzado y con un sistema político algo más limpio.

@Jorcha